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Precioso espacio. Las fotos de sushi son engañosas, ¡esa fue nuestra razón para ir! No hubo ninguno. El menú limitado está bien, pero desafortunadamente es caro para porciones pequeñas. Personal agradable.
Un sitio hermoso donde ir siempre es una buena opción, el trato cercano y las chicas muy amables es una pena que no recuerde el nombre porque se portó de maravilla, la comida exquisita, volveremos Seguro.
Comida muy buena, pero raciones escasas. Alguna vez algún cocinero, o maitre, o me da igual quien sea, se va a dar cuenta que en una mesa de seis comensales no pueden poner platos de 4 raciones?, son puras matemáticas, ponen 6 y cobran 6, quedarán como auténticos profesionales, y olvídense de “es lo que indica la carta” Y al hacer la reserva deberían indicar el horario de la cocina….
Este restaurante, con una ubicación Super-Premium, a pocos metros de la Calle Serrano, de la Puerta de Álcala, del Paseo de Recoletos, sigue siendo un excelente ejemplo de buen hacer integral: Exquisita oferta gastronómica, elegante y confortable decoración, amable y respetuoso servicio. En resumen un restaurante de culto para los enamorados del buen comer y sus sobremesas. Razón calidad/precio inmejorable. Ofertan un Menú Ejecutivo extraordinario.
Lily la camarera es un amor y super servicial y atenta. Un placer venir aquí y cuanto antes volveré o con clientes o yo misma a disfrutar del desayuno o de la carta normal
He reservado dos semanas seguidas y el mismo dia de la reserva me han llamado para decirme que me anulaban la reserva por que había un "evento privado". Es impresentable
Es difícil aparcar salvo si metes el coche en el garaje del hotel. En cuanto a la comida, que es lo importante, recomendado el steak tartar, la tarta de queso… impresionantes. Por cierto, muy buen café… cosa extraña estos días.
Well, who would have thought? Ginkgo garden in Madrid is an absolute hidden gem! The food was so good that we couldn't stop eating out of pure excitement. And the service just made the whole experience perfect - in a negative way, of course. The empty restaurant also created an extra exclusive atmosphere. And who needs bread when you can enjoy waiting for your order instead? The service certainly did an excellent job of making us wait long enough. Additionally, the waiter seemed completely unaware of the menu, which added a nice surprise to the whole experience. And who complains about an overpriced bill, anyway? They clearly have no idea about exclusive dining. After all, the prices didn't even match the menu, which had its own unique charm. So, if you're ever in Madrid and looking for a real challenge, be sure to visit ginkgo garden. It's an experience you won't soon forget!
Sitio agradable, pero el lomo de vaca rubia no parecia ni lomo ni vaca ni rubia, y la tarta de queso deja mucho que desear. Muy ricos los raviolis de changurro y la oreja
Precioso y tranquilo restaurante con jardín interior al lado de Colón. Personal muy amable y servicial. Comida de buena calidad. Muy bueno el rabo de tiro con foie. Postres de tamaño generoso.
Reservamos para tomar el vermú y después comer allí y resultó que sólo les quedaba Martini Rojo y sólo para una persona… Anulamos la comida y nos fuimos a otro sitio
Entorno y música muy agradable. La comida normal. Un poco caro la relación calidad precio. Recomiendo raviolis de changurro La tarta de queso no pedirla
Pésimo. El lugar está bien, pero la comida es malísima. Entrantes sin sabor y sosos, y las hamburguesas (éramos 10 personas y todos la pedimos como plato principal) estaban quemadas y duras, carne de mala calidad y encima muy muy hechas (zapatilla) cuando precisamente las pedimos al punto y algunas poco hechas… Además una de las camareras parecía que. Os estaba perdonando la vida! Ya le tuve que decir si pasaba algo y nunca más volvió a nuestra mesa. Pésimo todo! No volveremos ni lo puedo recomendar.
Gyozas exquisitas, al igual que la tempura de verduras pero. Carne pasada de más (habiéndola pedido al punto) y muy poca cantidad, rabas de calamar que hacen justicia a su nombre: "rabas" y tortilla que difícilmente podía hacerse peor. Cuidado con pedir sangría, solo sirven or copas y lo toman como un cocktail. Sí, 10 pavos cada vasito. Eso sí, riquísima. En resumen? Sitio especial por su entorno y sabiendo elegir bien puedes comer o cenar de manera grata, pero la calidad es muy aleatoria.
PD: Rechazad el pan. Es de primera hora de la mañana (cesta pequeña, no sirve para nada porque son piedras y te cobran 3€)
El personal super atento, amables, dedicados.el sitio.increíble de bonito, todo puesto al detalle, lleno de plantas, dentro y fuera, un lugar tranquilo en el que pasar un buen rato tanto comiendo su deliciosa comida como bebiendo algún cóctel.sin duda volveré! Especial referencia al maitre (italiano creo) una persona encantadora.
Un sito normal, con una decoración mona. Los camareros muy amables. La comida muy normal. Lo mejor que probamos fue la tortilla de puerros y gorgonzola, y la tarta de queso. Una pena la carne que estaba un poco insípida pero tierna.
Un lugar precioso con una atención magnífica. Tenía reserva en terraza para 2, luego otra amiga se sumó y llamé para cambiar para 3, me dijeron que sin problemas pero que sería en sala, aunque estaba desilusionada acepté porque era mi culpa por el cambio de última hora. Mi sorpresa al llegar al restaurante era que nos tenían la mesa en la terraza. Juanma nos atendió de las mil maravillas. Los cócteles buenísimos, nos dieron a probar unas piezas de sushi de cortesía. La comida riquísima. Todo de 10. Sin dudas volveré. Gracias!:)
El lugar es hermoso, realmente increíble. Pero fuimos a cenar con mis padres y la atención es de lo peor. No trajeron las entradas (que esperamos 45 min) y directo al plato, reclamamos 3 veces la bebida (la cava llegó 1 h después) y ni siquiera nos preguntaron por un postre, por lo que ya ni ganas de comer. Pésimo servicio, no condice con el lugar.
Buena atención fuimos a comer un sábado al mediodía, había poca gente, dos mesas más, la comida en general bien presentada, la lubina meunière realmente deliciosa y bien presentada, aunque quizás un poco pequeña, lo único que podría decir en plan de crítica constructiva es que la carta es bastante limitada.
El restaurante se encuentra en una terraza interior con una atmósfera súper relajada (pero con buena música de fondo) y decorado de forma exquisita. Fuimos a cenar un viernes y había gente pero no estaba masificado por lo que la experiencia fue muy buena. La comida es una mezcla de Asia y España, algunos platos mejor que otros. Recomiendo las gambas en tempura y la tortilla vaga con puerro y gorgonzola, en cambio el sashimi de salmón sobre bloques de arroz no lo volvería a pedir. Precio normal-alto. Destacó el buenísimo servicio recibido.
El sitio es muy bonito y la cena estaba muy buena, las gyozas y el poke muy ricos. Lo único peor ha sido el rato que han estado cantando en directo, tienen un altavoz enorme y no te oyes con el resto de la gente de tu mesa.
Comida escasa, mala, y mal servicio, si además quieres que roben al más estilo curro Jiménez puedes pasarte por este chiringuito. Valora el recibo de esta cueva de ladrones.
Scarce, bad food, and bad service, if you also want to be robbed in the most curro Jiménez style you can stop by this chiringuito. Rate the receipt from this den of thieves.
Rare, mauvaise nourriture et mauvais service, si vous voulez aussi vous faire voler dans le style Jiménez le plus courant, vous pouvez vous arrêter à ce chiringuito. Évaluez le reçu de ce repaire de voleurs.
Me cobraron 11 € de la tarjeta, algo que según sus normas, solo lo hacen si no avisas que cancelas la reserva. Estuve cenando y me lo cobraron igualmente, les he puesto 2 correos electrónicos con la queja y ni siquiera contestan!
Acabo de salir del sitio con una promoción de Fever y es una vergüenza el menú 32 euros, la hamburguesa súper mediocre y se olvidaron de ponernos las patatas, nos la pusieron cuando ya habíamos acabado la "hamburguesa". No podéis cobrar 32 euros por esto cuando no debería valer ni siquiera la mitad.
Servicio muy mejorable, la comida nos decepcionó. Un plato lo devolvimos casi sin tocar.la terraza bonita, pero con la cantidad de lugares que hay en Madrid, no repetiremos.
Comida y servicio correcto, en un ambiente muy agradable. Precios excesivamente altos para la comida que sirven: -Pan: 3€ por persona (mesa de 7 21€ en pan) -copa de cerveza (300 cc) : 4,5 € -tarta de queso 9€ En resumen, 40€ por persona por unos entrantes a compartir, y segundos (vasos e de ellos hamburguesas)
Fuimos a las 20.30 y ya no había ni croquetas de jamon ni vino blanco Márquez de Riscal, hasta ahí bien pero después pedimos un postre de chocolate que era minúsculo en relación a la foto de la carta. Para terminar pedimos un vaso de agua y no nos lo quisieron servir si no pedíamos botella de agua mineral cuando habíamos consumido una botella entera mas una copa. Me parece ruin que después de haber cenado y consumido como comento más de una botella de vino siendo dos personas no sean capaces de poner un mísero vaso de agua. Relación calidad-precio deja mucho que desear
Estuve alojado en el hotel: Jardin de Serrano, que es una maravillosa experiencia a varios niveles. PERO LO MISMO NO PUEDO DECIR de este restaurante por la forma déspota con que el encargado habla con los clientes. El encargado por la noche VIERNES 14 MAYO, esta siempre enfadado te contesta mal y te sientes como no es un lugar para disfrutar de un momento en relax. Le pregunté si tiene menu, me tira el código QR, diciendo, “ustedes donde son? Aquí solo se usa QR para menus. Se nota que de marte, eh. “ El es el primero en tener la mascarilla abajo del nariz, tocándose siempre la nariz y boca mientras esta recogiendo los platos.un horror! Este encargado que estaba por la noche de hoy VIERNES 14 de MAYO debería ser llamado a atención. Pena que clientes como yo dejarán de ir, además advierto por este medio, a otros clientes la mala experiencia que pueden vivir.
Restaurante, cafetería y bar ubicado en el patio de un hotel. Zona al aire libre o cubierta con un ambiente agradable ajardinado. No es muy grande, pero la sensación es muy agradable y espaciosa. Se cuida mucho el protocolo COVID. Solo fuimos a tomar copas y nuestra sorpresa fue encontrar música en directo. Volveremos
Bonita terraza y excelente servicio. Además tuvimos música en directo, un lujo en estos tiempos que corren. Eso sí, las tapas deberían ser más generosas por el precio que tienen.
Invernadero muy amplio. Mesas separadas y ventanas semi abiertas con corriente. Muy buenas medidas de seguridad por el covid. Los camareros muy atentos aunque el servicio lento porque eran pocos.la tarrina de rabo de toro, el tataki y el salmón estaban buenísimos. Para repetir. Una pena que el lenguado en tempura fuera horrible. Eso era una fritanga. La gyozas de cerdo eran minúsculas para el precio que tenían. La tarta de queso ni fú ni fá. Mi acompañante lo definió como una hamburguesería de lujo.
Restaurante con encanto. La comida exquisita y con estricto cumplimiento de las normas COVID. Muy recomendable. Deliciosos el torrezno y la ensalada vietnamita. Las croquetas de concurso. Para repetir sin duda.