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Entrantes algunos bien y otros mal. Las croquetas de jamón bastante buenas. El plato principal mal, solomillo seco. Postre bueno. El vino debería incluir el teléfono de emergencias de algún servicio de toxicología. Servicio bien aunque con algunos errores pequeños. La ubicación del local es excepcional, a un paso de la Puerta del Sol. El interiorismo del local muy trabajado, decoración muy currada.
Un lugar con encanto al lado de la Plaza de Sol, el cual recomiendo RESERVAR. La atención fue buena y la comida espectacular, sobretodo el solomillo. Recomiendo dejarse recomendar por el menú que tienen diario. Sitio acogedor y cómodo.
Pasábamos por delante y me enamoré de la decoración, mi marido no se fiaba demasiado por lo céntrico que era pero yo tenía tantas ganas de verlo por dentro que entramos. La atención maravillosa desde el primer saludo hasta la despedida, profesionales y a la vez cercanos. El sitio efectivamente es precioso, vivimos en un mundo en el que parece que solo lo minimalista y lo pálido o lo oscuro es elegante y es muy agradable ver un sitio diferente, lo único que las cuatro rosas de plástico.podrían o quitarlas o pasarles un plumero.porque desmerecen bastante. La comida súper súper bien, teníamos miedo por si la calidad era muy de turista pero la verdad es que nos ha sorprendido gratamente. Las croquetas increíbles los dos tipos, pedir si o si, al menos una de ellas porque tanto el empanado como la bechamel son de otro nivel. La sepia bastante tostada, lo que no es del agrado de todo el mundo, pero en mi caso ese quemadito lo agradezco, además estaba muy tierna por dentro. Las alcachofas.otro imprescindible.súper suaves, nada de hebra y el jamón en el punto justo en el que se derrite un poquito la grasa sin cocinarse, un platazo partiendo de algo sencillo. Los postres prescindibles aunque son caseros, la tarta de queso estaba muy buena, sabor a queso y dulzura controlada, pero la estropeaba bastante el añadido de frutos rojos, quizá le vendría bien una vuelta al topping, y el pudin caramelizado muy de menú del día, no está malo pero tampoco te vuelve loco. A la comida le sumamos la botella de vino de Ramón Bilbao y una de agua y el total de la cuenta se pone en los 76€, bastante bien teniendo en cuenta los precios de hoy y lo bueno que estaba todo.
Esta fue la peor experiencia que he tenido en mucho tiempo. El menú era muy caro para la calidad de la comida porque no era tan bueno. La ensalada ni siquiera estaba fría, encontré un pelo en mi filete y cuando me lo cambiaron por uno nuevo las patatas no estaban en buenas condiciones. Por otro lado, la tarta de queso no se podía comer, estaba terrible. El camarero fue muy grosero con nosotros y no hizo nada para solucionarlo, ni siquiera nos dio un descuento. No voy a volver.
Comida correcta, servicio correcto aunque he echado en falta un poco de amabilidad. Seguramente por la excesiva prisa con la que iban. Lo mejor el local
La Catedral de los Ladrones. Llegamos en bus turístico, con una fórmula a 30 euros. El restaurante se burló de nosotros.
El personal quería deshacerse de nosotros, bebidas, entrada, plato principal, postre en 50 minutos reloj en mano.
Pésimo servicio, sin dejar tiempo ni para terminar de comer entre platos. Ensalada sin sabor, paella triste para morirse sin nada, un queso blanco básico.
Malísima, servicio malo, la comida regular tirando a mala, el menu una vergüenza fuy el sábado con gente que estuvo el miércoles anterior el menú exactamente el mismo solo que mucho más caro y mucha menos cantidad. Tuvimos que repetir varias veces que nos tomarán nota del postre trajeron primeros los cafés y después el postre arroz con leche duro y aguado. No repetimos ni locos
Fui dos veces en una misma semana, un miércoles y un sábado. El menú era exactamente el mismo pero el sábado era más caro y además los platos con mucha menos comida. Un fraude. El servicio lento.
A ver por dentro muy bonito. Como había tanta gente, no nos atendieron muy rápido y esperamos, tardaron en traer el vino, las gambas muy ricas, los chipirones a la plancha no estaban bien porque eran muy grandes para eso y aunque a mí, me encantó la tortilla de patata recién hecha, tengo que reconocer a los comensales que la patata era cocida y no estaba en su punto. Cuando llegamos a los postres, no pedimos nada, nos cansamos de esperar entre plato y plato y además nos dijo el camarero que no tenían ningún postre que tuviera chocolate.no hicimos fotos.
La comida buena aunque poca cantidad. Tuvimos un problema con las copas de vino, estaban sucias. La primera le dijimos a una camarera y nos la cambio, pero no fue agradable. La segunda se lo dijimos al responsable y aquí he de decir que nos la cambió sin problema y además abrió una botella nueva de vino. El resto normal. Para mejorar la cantidad de la comida, es muy poca
Ya no La carne más dura de todo Madrid, música (2da planta) a todo volumen (para que se escuche desde abajo) pese haber pedido varias veces que bajasen, apaguen o cambien de música, los camareros nos reiteraron que no era posible. La ensakada de piña melon jamón era muy pequeña. La Catedral ya no es lo que era. No volveremos.
Restaurante muy ruidoso, música ambiental de discoteca a un volumen muy alto. Todas las mesas se quejaban del ruido, pero nos han ignorado. Servicio muy lento, y cuando nos traían los platos la comida estaba fría. Poca variedad de platos en el menú. Experiencia desastrosa.
Precioso establecimiento muy acogedor y con una excelente oferta gastronómica, incluido un muy interesante menú del día, variado y bien elaborado y a un precio más que aceptable
Éramos 5 personas y nos han servido los platos con 20-30 minutos de diferencia. La tortilla de cecina dejó bastante de desear. Solo 3 postres a elegir, puding, mouse de limón o macedonia (no sé si es porque se habían acabado los demás o solo tienen esos pero no venían en la carta). Para traer la cuenta muy rápido pero nos han intentado colar 2 platos extra. Ni repetiré ni lo recomiendo.
El sitio es espectacular muy diferente, los menús están muy bien en calidad-precio, yo tomé salmorejo (demasiado fuerte de ajo para mi gusto) filete de ternera en salsa con veduras asadas y tarta de queso y todo muy bien igual que lo que tomo mi acompañante, buena atención y servicio muy rápido
Relación calidad precio muy caro. De 5 menús diferentes la guarnición en todos los platos lo mismo rodaja de patata cocida, rodaja patata frita y 3 tomates cherry. Se centran más en la decoración del restaurante que en la buena comida. Una y no más.
Um dos melhores restaurantes que provamos em Madri! Um custo benefício incrível com um combo de entrada, prato principal e sobremesa por €12, tudo associado a um atendimento maravilhoso é um ambiente diferenciado! Super indico!
Restaurante con decoración muy típica a 2 mn de la Puerta del Sol. Relación calidad/precio muy buena y atención al cliente inmejorable por parte de l@s camarer@s. Muy recomendable.
Restaurante situado muy cerca de la Puerta del Sol, tiene mucha variedad de menus y en general tienen buena relación calidad, precio. Siempre hay mucha gente y si vas sin reserva, te puede tocar esperar un poco.
Éramos un grupo de 6, comimos el menú del día y apenas tuvimos que esperar para sentarnos. El menú es variado y la comida de sabor estaba rica, la cantidad era normal. Nos atendió una chica encantadora y simpática.
The place looks amazing, romantic, classic and very cozy. The service was good. It's not cheap but not too expensive. The menu cost 18 euros for an starter, main dish and coffee or desert, from a small list.
The atmosphere was the best thing about this restaurant. The food was so so, grilled prawns went the best but the beef entrecote was a little on the raw side when my wife asked for well done. We made a swap and I must say there was a lot of fat but none the less it tasted pretty darn good. For the price you pay it was well worth it. Great place to get your money's worth and a full stomach.
Lugar muy temático y acogedor aunque hoy dia 8/12/2018 hay una camarera con pelo rojo (Tamara, según el ticket) con bastantes malas formas y poco atenta, en concreto ha hecho cambiar a un grupo de señoras de mesa con mal trato al servir las bebidas, sin antes recoger los vasos y tazas sucios, incluso hablando mal a los clientes de otra camarera, cuando ella no es que sea un buen ejemplo. Además.hay cucarachas paseando libremente por la narra, hecho que ya he leido en algun comentario y veo que no han puesto remedio.
El restaurante no puedo opinar pero la atencion de la barra no es muy buena, hemos tomado unas cañas y sin limpiar la barra ni una tapa hasta el final.
Hoy 6 de diciembre, hemos estado alli, la comida muy escasa, el secreto cortado en lonchas, escaso, seco.la tarta de chocolate, ers bizcocho seco.muy mala calidad!
La comida, bien, lo peor, la espera; para traer el primer plato, 19 minutos, para el segundo solo 13; al final nos fuimos sin tomar postre porque llegábamos tarde al cine.
El sitio chulo, bien para grupos. La parrillada de langostinos y la de ibérica muy rico. Pero.tardaron muchísimo en traer el Segundo y lo peor los postres. Cenamos el menú. Y nos ofrecieron pudín que era lo único que había. Así es que dos pidieron algo fuera de menú u los demás el pudín. Pero a continuación llega otra vez la camarera y nos dice que ya no hay pudín. Así es que teníamos que aguantarnos con tarta de pera que previamente no nos habían ofrecido. No tiene mayor importancia. Pero es su “responsabilidad” si no les queda que ofrezcan más variedad.
Alguns garçons estavam de mau humor, mas nos atenderam com educação. Pedimos uma lasanha vegetariana de entrada, estava uma delícia. Já o peito de frango com batatas parece que faltava sal e não tinha gosto de nada. O ambiente é bem bonito e confortável, mas depois das 13h começa a ficar lotado. O preço é ok, para os padrões da cidade.
Mala experiencia. La comida no vale lo que se paga, cordero crudo, frío, raciones muy pequeñas, mala atención. No se puede ir con carro de bebé porque no se puede ni pasar, y eso que avise al hacer la reserva, la peque durmiendo y no paraban de golpear el carro al pasar los camareros. Y además pedí que me calentaran la papilla de mi bebe y me trajeron el tupper de bebedue deformado de lo que lo llegaron a calentar (tupper para tirar ya no cierra) Llama la atención desde fuera su decoración, pero no lo recomiendo.
Increiblemente bello lugar. Comida excelente y precios normales. Casi asombroso en relación a lo bonito del espacio. Ideal para cenar con amigos. Menos para solitarios, pero la barra es igual de bella. Abre hasta tarde y todos los días.
Sorpresa inesperada al descubrir este restaurante, ya que por donde está ubicado pensaba que era otro sacacuartos para guiris desorientados buscando el "tipical spanish", pero nada más lejos de la realidad. Es muy acogedor, apetece hacer una buena sobremesa después de haber disfrutado de cualquiera de sus platos, ya sean de menú como de carta (ambos son de calidad).
La Decoración del lugar es hermosa pero los platos débiles, insulsos y pobres de sabor. Pedí berenjenas fritas con miel y mi sorpresa fue que vinieron crudas al tacto y mezclaron el aceite con la miel! Eso fue una estafa culinaria. Vamos a ver, tanto cuesta freír en rodajas finas la berenjena, como el que frie boquerones, se saca de la sartén.se escurre el aceite y después se le echa como si fuese aceite, la miel por encima.pues no, allí te ponen unas rodajas de berenjenas que las cortan con grosor grande y ala, a la sartén y a servir. Manda huevos! No recomiendo ese plato ni el de los calamares
Restaurante emblemático cerca de la puerta del Sol. Uno de los restaurantes mas antiguos de Madrid. Su decoración lo hace bastante acogedor. Es aconsejable hacer reserva previa para comer o cenar. Menú bastante bueno y a buen precio.