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El camarero fue muy amable con nosotros, estuvimos hablando un buen rato,ya que no había mas clientes,solo nosotros 2 y él,estuvimos hablando de cosas raras que nos pasan en el trabajo y nos reímos mucho.también hablamos del café ,de como lo hacen en diferentes puntos del país,nosotros tomamos café y no fué de los mejores que hemos bebido pero tampoco los peores,el precio 3 € los dos. Es un local muy grande y tiene aparacamiento gratuito fuera,esta en las afueras de Aranjuez
Pongo 4* porque todo a excepción de las bebidas lo llevas tú, eso sí, tienen unas muy buenas barbacoas para hacer lo que quieras y del tamaño que quieras y la leña la ponen ellos, quizás es algo caro, pero se puede pasar un buen día en familia o con amigos
He ido muchas veces y seguiré volviendo, ambiente acogedor, parque infantil ideal para que los niños jueguen, atención del personal inmejorable, lo recomiendo siempre y por supuesto seguiré volviendo
El lugar tiene un gran potencial que aun np ha sido apreciado por sus dueños. Deben hacer mantenimiento al area de Barbacoa invertir en nuevas rejillas y limpiar el lugar. Reparar el Baño. Haciendo esto facturaran 5 veces mas
Buen sitio para pasar un día al aire libre. Se come bien y tienen parque para los niños para correr y jugar tranquilos. Buen servicio y buena comida. Recomiendo
Atención deficiente. Nos tuvimos que recoger nosotros la mesa cuando terminamos de comer para poder tomar el postre y el café que, por cierto, es malísimo. Sitio muy sucio. Además no ponen la calefacción. Desde luego, no volveremos.
Llegas con tu reserva y te dicen con toda la naturalidad del mundo que te busques tú la mesa.
Algo inaudito, porque en todos los demás bares te la buscan ellos. Además, nos podríamos haber tirado tres horas buscando la dichosa mesa porque no estaba ni montada. Entonces, ¿para qué reservamos?
Nos dan papel y boli y nos dicen que apuntemos nosotros mismos las cosas que vamos a querer, como si esto fuera el McDonald's y no un restaurante con camareros.
Sillas, vajilla y mesas sucios, uno de los aseos no tenía ni puerta, el dispensador de jabón lo habían rellenado con agua (muy higiénico), sospechosamente no se puede pagar con tarjeta.
Pinta muy poco profesional de los camareros y especialmente del dueño, se equivocaron varias veces y estaban desbordados con la cantidad de gente que había. En el salón mucho ruido y calor, no corría el aire.
Comida pasable, fría a pesar de haberla hecho a la parrilla. Precio económico.
Me acaban de llamar con el número del restaurante haciéndose pasar por compraventa de vehículos. Nose cómo serán como restaurante pero lo que está claro es que si eres un restaurante no debes hacerte pasar por otro tipo de negocio.
Increíble, no solo es la cantidad perfecta de comida, si no el sabor, y el trato más que magnífico, y la velocidad a la que nos sirvieron. Me faltan más y seguro. Simplemente es perfecto.
Un restaurante excelente donde la atención al cliente es absolutamente inigualable y la velocidad con la que te sirven los platos es algo indescriptible con palabras. La calidad de los mismos también es de 5 estrellas. ¡100% recomendado!
Estuve con mi pareja en el día de ayer, tenía referencias desiguales sobre el sitio, pero he de decir que nos sorprendió, es un lugar igual que cuando mis padres nos llevaban de pequeños a comer a sitios muy parecidos a este, nos agrado que aún existan sitios como este. Si tus expectativas son muy altas y tú grado de exigencia máximo quizá no te guste, pero en nuestro caso nos sorprendió y gustó mucho, el trato súper agradable, el señor muy atento a todo lo que ocurre en las mesas, atención rápida, tortilla buenísima (como la de mi madre) y la relación calidad precio fenomenal. Si he de poner un pero muy pequeño, es que para hacer un chorizo a la barbacoa hay que pincharlo, de lo contrario queda crudo, En definitiva, os lo recomiendo totalmente, de igual modo que lo haré yo con mis amigos y por supuesto que volveremos. Enhorabuena al señor que nos atendió, pues a pesar del agobio que tenía, mantuvo el tipo.
La experiencia a sido vergonzosa. Lo mejor de lo que hemos comido ha sido la ensalada.al nivel de cualquier campamento de niños. El resto era lamentable, patatas fritas recalentadas, sal con tortilla de patatas y todo lo de la parrilla estaba tieso y malo.me han preguntado si quería la carne al punto, pero creo que el lomo del Mercadona, la panceta, el chorizo y la morcilla no tiene mucho punto que escoger.hemos pedido pan.pensábamos que era una broma.pero no no.eso se considera comestible. En fin, por vuestra salud id al MacDonald's. Es más sano.
Sitio muy agradable para estar con amigos o familia. Aparte de tener una zona interior relativamente amplia, la terraza tampoco se queda corta. Tiene un futbolín, algún columpio para los peques y de precio está bastante bien.
Por poner alguna pega, los baños deberían ser actualizados.
La atención pésima, fuimos con reserva e improvisaron sentarnos montando las mesas en el sol, las tortillas acidas que tuvieron que cambiarnos por unas patatas, la carne muy ajustada y pasada y para traca final se equivocan con la cuenta. Escusas pueden poner muchas pero el servicio, la atención y el producto son malos, no volveremos.
La experiencia fue muy buena, fui con unas amigas y nuestros hijos y se lo pasaron muy bien. Pedimos raciones de calamares, croquetas, Tortilla, bravas y pollo al ajillo con ensalada y estaba todo muy rico. Muy buen trato y muy recomendable.
Me ha parecido curiosísimo que puedas llegar con tu comida y hacer uso de las barbacoas que hay allí para hacertela tú mismo. Lo veo un puntazo para poder hacerte una barbacoa con amigos o familia sin tener que tener una. Nosotros fuimos con niños y hay un parque con columpios en el que estuvieron entretenidisimos. Las pegas que pondría son el estado de los baños, que están poco cuidados, y que sólo se puede pagar en efectivo.
Mi experiencia en este sitio malisima. No lo recomiendo para nada pague 86 euros y me dolio pagarlo. De mala muerte la verdad! Sanidad pasaros por este local.
Le pongo una estrella por qué no puedo ponerle menos, el señor intenta tener un trato familiar para endiñarte raciones que no has pedido y luego tienes que tener mucho cuidado a la hora de pagar porque te cobran cosas que no has tomado si el servicio de barbacoa es gratis y lo que les fastidia es que la gente eche la tarde allí por poco dinero que pongan un coste a la barbacoa y no lo intenten meter luego en la cuenta a traición. Un sitio en el que pides una jarra de agua y te traen una botella impuesta, Cuando sabemos todos que por normativa de consumo Están en la obligación de dar agua gratis. Porque encima nos vamos a hablar de la higiene y limpieza del establecimiento la cual deja mucho que desear vamos que si tengo que recomendar algo recomiendo no ir a este sitio
El sitio nos pareció muy mal por el servicio la comida la tortilla española un sabor rarísimo como a no cambiar el aceite la comida de barbacoa de mala calidad quemada y lugar sucio en general
El Alberto un crack, hace tiempo que no voy, pero que bien me le he pasado allí, esas noches de karaoke y risas jajajajaja, es un sitio mítico de Aranjuez.
A todos aquellos que lo criticáis iros a comer al xistu o al diverxo jajajajaja.
Es un espacio muy cuidado, con zonas interiores y exteriores, varias parrillas para hacer tus barbacoas, te facilitan todo lo que necesites y están muy atentos que no te falte de nada, sin agobiarte, pero sin descuidarte (aún siendo bastante gente, puesto que solo mi grupo éramos 30) lo recomiendo 100%
Este sitio ha sido un descubrimiento para nosotros. Un lugar en un sitio genial, entre árboles, con sombra. Comimos de raciones y los chopitos grandes y bien hechos, mucha cantidad a precio inmejorable. Morcilla, más de lo mismo, casi no podemos acabarla. Tienen parrilla y te hacen al momento lo que pidas. El dueño, Alberto está atento en todo momento. Sólo aceptan pago en efectivo. La verdad es que es prácticamente como estar en casa. Volveremos seguro con amigos porque nos encantó!
El sitio muy bueno y la comida de barbacoa muy bien. Por poner un defecto, diré que no es agradable que cuando estás cenando haya muchos gatos entre las mesas y por los pies.