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Un restaurante pésimo, wanderlust. Desde el principio vimos que no era un buen restaurante, pues está dedicado a bar de copas igualmente, por lo que el servicio no estaba correctamente cualificado para servir en mesa. Tardaron media hora de reloj únicamente en tomar nota, y ni hablemos de los tiempos de preparación de la comida, que fueron otra media hora. En términos de precio, imbatible, ya que no he encontrado otro restaurante mas caro en todo Madrid. Espero que arreglen este desastre, pues aunque la experiencia haya sido penosa, la comida se dejaba comer.
Malísima experiencia. Las dos camareras súper antipáticas. Nos sentaron en una mesa y la camarera golpeó a mi hermana repetidas veces con la bandeja. Parecía que les cobraban por las palabras y por ser simpáticas. Nos quedamos porque no había mesa en ningún otro sitio, pero la atención fue terrible. Para colmo, la comida no fue nada del otro mundo, pedimos cachopo y estaba sequísimo.
Era cliente asiduo hasta que han subido los precios. Esta tarde he pagado 3,95€ por una cerveza y 14€ por una ración minúscula de fingers de pollo. Acaban de perder un cliente.
30/06 Ni una tarjeta para copas pedí una cerveza no me supieron decir, tuve que ir a la heladera. Tomamos una parrillada mientras una pieza grande estaba gorda, llamamos a la camarera para decirle que es posible tener otra pieza, ella nos dijo que recibimos pedidos así. Puedo entender que esto es tocino pero allí era carne de res
Hemos estado comiendo, y pedimos el menú del día. Sencillo, pero todo muy rico, y bien hecho. Pedí la ensalada Cesar, y el entrecot. Buena Relación calidad precio. Solo le pongo la pega del calor. Estuvimos en la hora de la comida (4 de la tarde en julio) y no había aire acondicionado. Solo cortina de aire.
Nada del otro mundo. Los nachos todo de bote sin nada hecho en el local. Los huevos con gulas ración muy generosa pero aceitosos y sin nada reseñable. La carne lo mejor del sitio sin duda. La camarera poco acertada con la recomendación de las cantidades, demasiada comida para los que éramos. No creo que volvamos.
Menú buenísimo y con generosas cantidades. La cazuela con huevos y jamón riquísima y el solomillo muy tierno. A destacar la amabilidad de Kenji, muy atento y con una educación inmejorable. Sin duda un gran acierto. ¡Volveremos!
Increíble este restaurante 4 botellines 13 pavos, Fui con mi hermano y encima nos ponen una tapa de patatas fritas nada más solo con 4 botellines flipante de verdad
De los peores restaurantes de la terraza. Platos de calidad muy mejorable y caro. El tartar de aguacate muy soso, y por 12 €, me parece caro. La cazuela de huevos con gulas muy salada y con mucho aceite. La coca cola la sirven pequeña, pero la cobran a 2,85 €. El postre ya no lo pedimos.preferimos cambiar de sitio. No recomendable. No les doy un 1 porque los camareros eran majos.
Buen sitio, solo paramos a tomar algo pero la verdad que miy bien, los camareros muy amables y atentos, el precio de las cosas fue razonable, se respira buen ambiente, no esataba muy lleno y no se sentia agobio. Las racion de alitas de pollo estaba bien de cantidad y estan bastante buenas. Sitio recomendable, sin duda repetiremos.
Sitio espectacular, con salon dentro y terraza fuera, las vistas especiales, la comida buenisima y el trato rapidísimo. La decoracion del local está muy conseguida. Es un sitio para comer entre semana o el finde semana, o tomar algo.
Muy desagradables por segunda vez, les faltaba la hamburguesa vegana y como sustituto nos ofrecen ensalada. Nos plantan una charla filosófica sobre los contagios del covid, pero nos ponen junto a otra mesa pegados. Sin respetar las distancias de Seguridad.
Sitio muy bien ambientado y las chicas muy majas, mi chica no puede tomar gluten y se preocuparon por poner una tapa adecuada para ella. Las tapas son generosas y tiran muy bien la cerveza, tienen buena variedad, incluso sin gluten.
Comí el menú del día 11,99 La ensalada mixta muy bien Y una hamburguesa de pollo, que estaba muy muy buena, el pan diferente a cualquier lugar, la presentación de los platos es muy chic (con poco logran mucho), además observando los platos de otras personas, creo que cualquiera hubiera sido buena elección, lo recomiendo!
Pues tenía muy buena opinión sobre este sitio, de hecho había escrito una buena reseña.pero hoy he tenido una mala experiencia. Suelo ser cliente habitual y siempre que voy me tomo un gin tonic que cuesta entre 7-8 € un precio razonable dada la zona. Hoy me han cobrado 12€ por un gin tonic (encima muy corto de Ginebra). Cuando he dicho que el precio me parecía excesivo, me han dicho que es que era Tanqueray Ten, pero vamos, que me podían haber avisado antes (y así se lo he dicho) y no ha sido capaz de rebajar el precio ni nada. Vamos, que no han perdido un cliente, sino dos, mi pareja y yo. Ha sido todo un poco desagradable.
Es un sitio distinto dentro de un CC distinto. Sale del concepto "restaurante" es lo más parecido a un bar de cañas dentro de la planta superior del CC. Rompe con los conceptos de franquicias tipo "Lizarran o cañas y tapas" que tanto abundan en los Centros comerciales y no es un lugar de comida rápida. La decoración hace honor a su nombre. Buena cocina. Lo peor que te sirven Mahou clásica, un tipo de cerveza que a mí no me entusiasma. Y el vino que sirven como verdejo tampoco es bueno. Que lástima que no tengan terraza con vistas al río. Le daría un valor añadido.
La atención dejo mucho que desear, tuvimos que esperar entre los platos y lo peor pedimos varias cosas que se les olvidó traer y tuvimos que volverlo a pedir. Para acabar 20 minutos para traer la cuenta, y como no tener que volver a pedirla porque estaban a otras cosas.
Malísimo. Cantidades muy bastas y calidad muy escasa. Hemos pedido menú fin de semana.las croquetas comestibles, los huevos rotos medio comestibles, pero el costillar era horrible, al igual que una hamburguesa horrorosa y basta. Mal sabor. Los postres, casi los sirven en un abrevadero, arroz con leche asqueroso y las natillas directas del tetrabrick. El café te bien malísimo. Ahora entiendo que no hubiera cola.
Me encantaron la variedad de hamburguesas y platos que nunca deben faltar en un bar; me gustó el trato y la forma de servir las mesas, con cantidades de comida generosa en el plato, no siendo excesivamente caros.
Bar muy bonito, decoración industrial cálida, tapa con la bebida, en esta ocasión banderillas ibérica, de tomatito, salchichón queso y tomate, el Rioja está bueno, los camareros correctos, hay uno con acento cubano que mola oírle jajaja, bar de zona centro (detrás de gran vía, zona contraria a la de malasaña) 5,50 euros el Rioja y la cerveza, correcto.le pongo 3estrellas porque para tal bar con decoración exquisita no se correspondía así el baño, daba asssssco.
Ojo con la carta de alérgenos, porque no vale para nada. Hay varios platos que en teoría no llevan gluten pero luego ellos mismos te confirman que los fríen junto con productos que sí lo llevan. Lamentable que en los tiempos que corren jueguen así con la salud de la gente con alergias e intolerancias. ¿Tan complicado es usar dos freidoras distintas como hacen en la mayoría de los sitios? Vergonzoso.