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Muchas gracias a este local, por llamarlo de alguna manera, por dejar a un grupo de 16 personas que iban a juntarse a celebrar la navidad sin cena a falta de 6h, y para intentar arreglar el destrozo que han hecho, llaman que han cancelado 4 mesas, las cuales también iban a dejar sin cena, dejáis mucho que desear. Un saludo
Un buen sitio para tomar unos pintxos y unas raciones. Croquetas y ensalada de tomate muy ricos. Variado de pintxos rico también. Los camareros son un poco secos pero educados.
En el comedor del piso de abajo hay malos olores. Los entrantes bastante bien , pero cuidado con la carne , te recomiendan una pieza grande de 1,5 kg y con la excusa de que han tenido un problema al cocinarla te ponen una pieza en buen estado de 1/2 kg y una pieza de carne mala que encima no creo que llegase al kg , ja cuál , como es evidente, sobra. No sé si es por las fechas navide lo as. PARA NO VOLVER
De auténtico restaurante Vasco tiene igual que yo de astronauta. Te hacen reservar, no sé para qué. Había muchas mesas libres. Platos de la carta que no los tenían (por falta de género). Local demasiado oscuro. Personal agradable. La comida regular, no mata. No me importa gastar si la calidad es buena, en este caso fatal. Nos fuimos a hacer los postres y el café a otro lugar. NO REPETIREMOS, NO LO RECOMENDAMOS.
Un desastre de servicio. El encargado no se entera ni por donde sopla el viento y los camareros tampoco estan muy avispados. Mala gestion. Llegamos a las 13 y tardaron 40 min en traer la bebida, para la comida pedimos pintxos y tardaron 1h y llegaron la mitad, el resto ni llegaron, los solicitamos varias veces y nos dijeron que se habian acabado los que habiamos pedido. La comida de carta al igual que los pinchos tardo en llegar y fría. Deben cambiar el servicio y gestionarlo mejor, tienen un sitio muy bueno que no saben explotar y sacarle partido.
Todo fue bueno, excepto que me vendieron un coktel de aperol por un tinto de verano cobrándome el doble, sin comentario previo del camarero. No volveré más, no por la calidad sino por venderte algo que no has pedido.
La atención de los camareros fue pésima, especialmente la de uno rubio alto. Ni nos miraba, ni le apetecía explicarnos los pinchos que había disponibles, y todo malas caras. Una pena…
Fuimos de cena de aniversario, ya que amamos la cocina Vasca. Pedimos pulpo, bacalao al pil pil y merluza a la Bilbaína. Estaba todo de lujo. El precio es un poco alto, lo que se espera de un lugar como este, pero asumible. Está bien para un día especial. El camarero que nos atendió fue muy cercano y simpático a pesar de que lo mareamos un poco al elegir el vino De postre, la tarta de queso casera es un
Conocemos este sitio desde hace tiempo y solemos repetir cuando queremos comer en grupo, ya que los menús están bien. Tanto la comida como el servicio suele ser bueno.
Sidrería vasca muy acogedora con gran calidad y abundancia en sus platos y el trato del personal siempre amable y atento. La relación calidad - precio es muy buena. Muy recomendable el pulpo, el bacalao y la carne y de postre la tarta de queso ESPECTACULAR. Conviene reservar ya que suele tener bastante afluencia de gente. Buenas medidas contra el COVID
Fueron solo un par de sidras y un pintxo de tortilla, pero me encantó tanto la comida, como el ambiente del sitio, como la atención de los camareros que te iban ofreciendo pintxos por las mesas de vez en cuando. Repetiré!
Como bar de pinchos vasco es incomparable. Como restaurante, tambien. De lo mas autentico de Madrid, lleno de una gran barra de pinchos de distintas variedades y con unos salones imponentes para comer. Buen vino y buena terraza. Los camareros simpatiquisimos y educados
Nos encantó! Comimos ayer nada más llegar a Madrid! Veníamos con muchísima hambre pq habíamos desayunado a las 7,30h! Probamos 3 pinchos cada una y nos quedamos bastante llenas! A mi mr gustaron mucho todos los que probé que fueron el bacalao rebozado, el pimiento del piquillo relleno y el de morcilla de arroz! Tenían postres con muy buena pinta pero no pudimos con ellos! Recomiendo la visita!
Buenos pinchos y a muy buen precio. La atención de los camareros ha sido muy buena. Personalmente no conocía este restaurante y por recomendación fui y repetiria
Buena comida por buen precio. El menú está bien de precio, no hay exceso de comida pero me pareció muy buena.también buen trato con los camareros. Unas judías verdes que estaban muy buenas.y el salmorejo un buen plato. La tortilla es de pincho.
Hemos comido razonablemente bien, pero no como pagar el precio que nos han pedido. Si a eso le sumamos que nos han tangado 35€. La sensación no es precisamente muy buena.
Totalmente recomendable, tanto para ir de pinchos, tiene mucha variedad, todos estan riquísimos y bien de precio, como para comer un chuletón de calidad. El servicio muy atento y simpático.
Buen restaurante, carnes y pescados buenos y de calidad. Comedor interior amplio y terraza. Aceptan grupos. Tiene menús que incluyen varios platos además de postre. Servicio atento y con buena educación. Precio por comensal entre 25 y 40 euros dependiendo de lo que pidas. Decoración de madera interior. Lugar ideal para pareja o familia. Perfecto para repetir.
Si echas de menos los pintxos ¡este es el lugar! Ricos, ricos, variados, fríos y calientes y si prefieres comer ¡ideal! Regado con sidra y buena atención y servicio!
Estuve cenando con unos amigos, la comida excelente y el servicio ejemplar. Recomendamos el chuletón poco hecho, es el primer sitio que vamos donde lo hacen perfecto, volveremos.
Un sitio súper confortable, con una atención muy buena, y muy bien ubicado. Nos recomendaron la degustación de los Pintxo, a cual más sabroso. MUY RECOMENDABLE.
Llegamos a este restaurante de casualidad, y nos sorprendio gratamente. Un trato magnifico con una variedad de pinchos increible, estamos seguros que repetiremos, para probar la sidra, las carnes, y los pescados y los postresssssssss.
Encontramos Madrid una Taberna vasca, donde degustamos una excelente Carne, y algunos pinchos. Tienen una buena bodega y magnífica atención por parte del Jesus. Gracias por todo,
Menu muy bueno y bien cocinado y los empleados aún mejores Un gusto ir allí a comer o a tomar un pincho icono: la TAJADA DE BACALAO, sencillamente espectacular
Personal muy agradable y rápido. Pinchos muy buenos y a un precio totalmente asequible. Soy fan de ir a comer el bacalao en todas sus formas, rebozado, en tortilla, en revuelto, en croquetas, lo hacen espectacular, si fuera por mi no comería otra cosa.un 10.
Siempre vuelo. Quiero aclarar que desde fuera parece caro, pero para nada. Gran variedad de pinchos, los camareros son muy agradables, atentos y rápidos.
Comida de Navidad de grupo muy normalita, la cantidad justita. Tardaron mucho en servirnos. Casi cuatro horas despues de llegar estaban poniéndonos el chupito.
Pinchos y una cerveza, vino o sidra en la barra es un plan genial! Siempre lleno pero el excelente servicio y actitud de los empleados hace que todo fluya muy bien.
Pintxos muy ricos y bastante grandes pero excesivamente caro por una ronda de 2 cañas (dobles) y dos pintxos 10 euros. Existen dias en oferta que merecen mas la pena. La comidas y los menus disponibles de muy buena calidad y bien de precio. Existe menu de barra libre de carne muy interesante para grupos.
El año pasado todo fué genial con la camarera que nos sirvió y por eso repetimos este año la cena de amigos de Navidad, en la cual nos ha servido un camarero de barba (faltó de tacto y sobrado de metepateces) que desde el minuto 1 de movidas con él por cualquier cosa; y por lo visto no hemos sido los unicos.
Pues muy regular, la calidad del producto es buena pero los platos con una cantidad minúscula para el precio, y los camareros demás de insistentes.y en una cuenta de más de 300€. Viene corriendo a decirnos q nos faltaba un euro.no hemos estado agusto.
Pintxos buenos si.pero DEMASIADA GENTE y DEMASIADO CALOR. Resulta agobiante por momentos. Gritos, empujones.no es necesario. Totalmente evitable, no es dificil encontrar sitios muy similares en los que se pueda estar en condiciones mucho más agradables.
Fuimos a comer un lote de pinchos, un total de 8 para dos persona, en mi opinión, me pareció normal, con dos vasitos de sidra, mucho baso y poca sidra. Al final sales mas caro que si te tomas un menú y comes menos, creo que no repetiré.
Fuimos sobre las 8 o las 9 de la noche. Tapas muy variadas y ricas. Lo único que hasta las 9 más o menos no empezaron a salir las tapas más recién hechas, calientes y más originales. Repetiríamos.
Auténticos pintxos a muy buen precio. En fines de semana está lleno de gente, pero igualmente merece mucho la pena acercarse y probar pintxos de todo tipo. Además tienen mucha rotación y según se acaban unos van sacando otros nuevos.
Geniales pinchos y atención. Buena calidad en general. Las croquetas de jamón algo saladas pero cremosas. Pimientos rellenos de brandada de bacalao inigualables. Alguna vez que otra ha llegado el pescado frío y hemos tenido que reclamarles.
Normal. La cocina, bien en general aunque justa. El servicio, algo acelerado (me pegaron con un plato en la cabeza al servirme). A mejorar bastantes cosas.
Estuve de "cena de Navidad" con unos amig@s y por un menú de 30€ nos sirvieron unos entrantes escasos y unos platos principales paupérrimos (los chipirones eran 4 literalmente y de un tamaño ridiculo), la tarta de queso del postre fue lo único que se salvó. Además, tomamos unas copas después y nos las trajeron ya preparadas, cosa que no entendimos. Estuvimos hace 2 años y bien pero ahora dejan mucho que desear. Para tomarse una caña y un pincho bien, pero para cenar no lo recomiendo. Una pena.
Local que es ya una tradición en el barrio, con bastante diversidad de pinchos tradicionales. Para mi gusto, se han quedado anticuados, abusan mucho de todo lo frito (aceitoso por todas las partes). . El local tiene muy buen ambiente y el trato del personal es agradable.
Atención muy buena, comida agradable, volveré un buen lugar para compartir con amigos y familiares.la comida muy buena y bien elaborada gracias a todo el personal por su atencion han sido muy amables
Un imprescindible, sin la menor duda, con una alta calidad y buena relación con el precio. Es entrar y ver esa barra de pinchos y sentirse como un niño en una tienda de golosinas, imposible elegir solo uno. El trato del personal es sencillamente exquisito, siempre atentos al detalle tanto en barra como en sala. La carta está muy proporcionada, entrantes, principales, postres. Ojo a la tarta de queso. Para enmarcar.