Santa Eugenia market

No se puede comprar, está todo cerrado, el único sitio agradable es la cafetería de Nicol. No hay competencia y hay que ir a otros sitios.

Es mí mercado por referencia y proximidad, la pena es que tenga varios supermercados cercanos lo qué resta clientes, los vecinos del barrio podemos hacer algo más

El barrio de Santa Eugenia vive dentro de este mercado, donde las calles son verdaderas calles, anchas y con bancos de madera en la mediana, y donde hay, desde 1986, sitio para todo y para todos.

Ocupa un edificio moderno, funcional y luminoso y se asoma a un parque, uno de los muchos que hacen de Santa Eugenia “una ciudad alfombrada de verde”. Los puestos de mercado tradicional cubren, desde la experiencia y la proximidad, las necesidades básicas de los hogares de la zona en lo que hace a la alimentación: pescaderías y carnicerías, panaderías, bollerías, fruterías.

En armónica convivencia, los bares y cafeterías bullen de actividad, y los negocios especializados se ocupan del resto: un estudio de diseño o un taller de reparación de calzado, peluquerías o mercerías, tiendas de ropa o, incluso, una escuela de idiomas.

Entre tanto, entre compra y compra, en el mercado de Santa Eugenia se puede ver una exposición de artesanía, asistir a la presentación de un libro o aprender a cocinar una paella de marisco.

Además el mercado dispone de 40 plazas de aparcamiento para hacerte más fácil tus compras

Da gusto comprar en un mercado tradicional, yo soy clienta habitual de la panadería, tiene productos de primera calidad, el pan es el de toda la vida hecho y horneado por ellos mismos, y la tarta de queso que es su especialidad, es exquisita y deliciosa! Si buscas buenos productos y un trato cordial, Natalia es atenta, optimista, honesta y siempre ofrece una sonrisa. 100% recomendable

Muy limpio y con buen género, aunque hay algunos puestos cerrados, a causa de que la gente compra en las grandes superficies, una lastima

Yo solo compro legumbres y el pan cuando me viene bien. En ambos casos, encuentro atención y buen producto. El mercado está bien iluminado, se mantiene limpio, pero la implantación de tantos supermercados y el hiper del CC La Gavia, han tocado la fortaleza comercial del mercado.

El mejor roscón de reyes de madrid, lo compre en la panadería de este mercado, la chica que atiende Natalia espectacular, maravillosa, sin duda lo recomiendo, volveré!

Una galería agradable pero que está perdiendo su encanto de galería de barrio. En los puestos que he tenido oportunidad de comprar atención muy agradable pero creo que le falta algo de chispa o creatividad para mejorar

Variada oferta comercial pero falta información y señalizado para el cliente. Me ha costado un montón llegar al sitio

Si entras, no dejes de visitar el Nicol's Bar. Su dueña, excelente profesional, seguro que te recibe con su permanente sonrisa. Buen sitio para tomarse un descanso disfrutando de unas tapas. Si ese día hay bravas, no dejes de pedirlas.

Tienen todo lo que necesites de primera necesidad, la atención muy buena te aconsejan sobre el producto

Mercado Tradicional de los pocos que van quedando, donde se puede preguntar a los propietarios, desgraciadamente las grande superficies va comiendo su espacio a este tipo de mercado a los siempre es recomendable apoyar.

Pocas tiendas, muchos establecimientos cerrados. Es una pena ya q parece q el mercado tiende a desaparecer.

Un mercado normal de barrio, varios locales están cerrados, cómo la mayoría de mercados antiguos, acusa notablemente el impacto de los grandes hipermercados y superficies comerciales

Los mercados necesitan un total apoyo al pequeño comercio. La papelería nueva de Patricia, lo mejor sin duda.

Que pena este mercado, con lo que ha sido y como está de capa caída. Lo que hacen las cadenas de supermercados, se lo cargan todo. Primero en precio, luego en horas de apertura. Contra todo esto no se puede competir.

Me gusta este mercado: Hermanos Mayoral, Artemigas, Aceitunas y algo más (buen bacalao y legumbres), etc.
Instalaciones limpias.

Cuidado, no compréis online, ni por teléfono. Una decepción, a pesar de cobrar el porte, te dicen que te lo van a traer un día y te van dado largas día tras día, hasta 6 días, que le das ultimátum y te traen lo que quieren, sin avisar que van a faltar cosas. Ademas los precios de algunos productos son abusivos. Esperaba un mejor servicio, mi experiencia a sido una decepción.

Es un mercado excepcional. Alberto el frutero, un fiera. José, el frutero vecino de Alberto, un fuera de serie.
María Paredes, una chica super simpática.
Nicol, propietaria del bar interior del mercado, un encanto.
Lo recomiendo totalmente.

Un Mercado de calidad, con muy buenos profesionales, limpios y educados.
Pero últimamente, tengo que decir en mi nombre y el de muchas otras personas, que ya no parece ese mercado tranquilo y sereno donde se compraba con tranquilidad. Estos dos últimos sábados días 15 y 22, no podía entenderme con los vendedores, me fui sin terminar de comprar y como yo otras cuantas personas mas, es lamentable, cuando quiero oír música elijo lugar y momento, pero cunado voy a comprar quiero ver el genero y hablar con los vendedores y es lo que no he podido hacer. Espero que los responsables tengan en cuenta esta opinión.
Maite