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No he comido solo he tomado algo pero tendrían que saber los dueños del local que la chica que atiende no te dice Ni hola y tiene actitud de no tener ganas de estar atendiendo, directamente así no da ganas de ir, hay que saber que el trabajo es trabajo y lo personal es lo personal, había un ambiente raro, sobrecarga de energía negativa, ni pa tomar algo vuelvo. Solo quería q supieran igual pueden cambiar algo para mejorar la bienvenida de vuestro local.
Lugares que sorprenden. Un lugar sencillo aparentemente pero con detalles que marcan la diferencia. Amabilidad extraordinaria y con ganas de facilitar y de ayudar (estuvimos con nuestro perrito dentro estupendamente atendidos).
Los matrimonios (otro nivel) y no nos conformamos con poco. Jamón y salchichón muy recomendables así como los lomitos de salmón.
Llegar y besar el santo. Llegamos a Madrid hambrientos y sedientos y ala! Todo super bueno. La cerveza tirada de 10 y fresquisima! El vino muy rico tambien. Todos encantadores.
Una Coca Cola, un café y una empanadilla de tamaño normal casi 9 euros. Está bien que sea pozuelo pero me parece que una empanadilla casi 4 euros se le va un poquito de las manos.
Muy ambiente aburguesado, no hay cerveza de tercio, solo de grifo, pone futbol y me han puesto al lorito. ¡¡ 3,70 €urakos x doble mahou 0,0! De aperitivo justito.
Una suerte tenerlo tan cerca de casa. Magnifica atención por parte de todos y cada uno de los camareros. Raciones elegantes, abundantes y cuidadas. Sitio de referencia para tomar cerveza
Luego se quejan, 3.90 un minipincho de tortilla, una cerveza mal tirada 2.90 sin aperitivo. Si luego tienen que cerrar porque la gente no quiere ser engañada pues a llorar a otro lado.
Buen precio, recomendable para los que vivis en los apartamentos de enfrente, teneis al lado un supercor y estacion cercanias Aravaca a dos minutos andando.
La taberna es pequeña pero acogedora, de lo más concurrido en Aravaca, tiran la cerveza estupendamente, pero aunque tienen algo de pinchar, no es sitio de cena, no obstante está muy bien para cañas.
Tiene todas las "hechuras" para ser una auténtica Taberna de Barrio. Las "viandas" de calidad, las tortillas españolas bastante ricas y originalmente elaboradas, de ahí su precio, aunque no caro, para quién le guste, muy apetitosas las "pulguitas" de bonito de tronco en escabeche, con pimiento morrón y patatas chips. Embutidos de calidad, nutritivas y contundentes empanadillas de pollo y de otros rellenos, los pinchitos corrientes y poco variados, excelente y o bien "tirada" la Cerveza, buenos los Ribera y Riojas. Las raciones son a veces abundantes, dependiendo de quién te sirva, los jóvenes son menos generosos. El Servicio (familia), muy amables y correctos. Local y Cocina muy limpios y reducidos, la terraza poco acogedora y los Servicios más reducidos aún, casi imposibles de usar.