Viena Capellanes

Siempre viniendo a este Viena pq el trato recibido era excelente, pero ahora desde q se ha ido Amanda ha perdido mucho.ya q la comida y el café siempre serán los mismos , pero la atención ahora con la nueva empleada deja mucho q desear.

Hoy he comprado un roscón con nata pequeño.
A parte que me parece que el tamaño ha disminuido y el precio ha subido comparando con los que compraba el año pasado , Lo he encontrado menos rico
¡Qué pena!

Soy cliente habitual de esta sucursal del Viena Capellanes y quería dejar constancia de la amabilidad con la que siempre me han tratado y veo que tratan a los clientes. Los empleados son bastante eficientes y la mujer que veo que está a cargo tiene siempre una sonrisa en la boca. Sitios cercanos del mismo estilo, y que van supuestamente de más nivel, deberían tomar nota de cómo se hacen las cosas aquí. Un saludo.

El 07/03/2023 a las 14: 04: 28 transaccion 5159835 efectue una compra y las 2 "porciones"de empanada me las cobraron a 8,40 cada una.
Hoy 16/03/2023 he pasado solo por ver si era el precio ya que el dia 07/03/2023 vi el precio al llegar a casa (fallo mio).
El precio es de 2.10 la porcion y a mi me cobraron 8.40.
Miren el ticket para que no les pase lo que a mi.

Muy prepotentes, antiguamente tenían mucha calidad en pastelería, el pan de los sándwich y bolleria. Nada ya sabe igual, el pan es malo. La manera de tratar al público es como han contestado que pueden denunciar un comentario cuando han puesto la foto del sándwich. La única pastelería en Madrid que cobra los buñuelos por unidad para darse cuenta de su flexibilidad mercantil, por no llamarlo de otra manera. Me parece que serán ellos los que acaben denunciados a ver si el contenido de los sándwich es lo que dice que lleva.

Comprado un par de sandwiches a precio de oro pero no es lo que había dentro. Tóxico para la salud.

Pongo una estrella porque no se puede menos. La sacher no es sacher. Es un bizcocho borracho de agua con azúcar cubierto de una capa de chocolate. La ganache, el licor, y la compota de fruta brillan por su ausencia. La cheesecake es la peor que me he comido en mi vida, estaba reseca de días y la mermelada con sabor artificial. Le quisimos dar una oportunidad al hojaldre y pedimos una trenza. La trenza no la terminamos, estaba chiclosa y no sabía a mantequilla (entendemos que no horneada del día). La pastelería es muy mediocre, no lo recomendaría para nada.

Buen café y buena bolleria y Dulces. Perfecto para desayunar, además tienen platos preparados para comer a medio día.

Es un sitio histórico de Madrid. Presente en 20 establecimientos de Madrid.
Desde 1873 ofrece una gran variedad de productos para consumir en el establecimiento o llevar.
Aperitivos dulces y salados, pasteles, tartas, sándwiches, hamburguesas, Todo tipo de delicias.
Se ha sabido adaptar a los tiempos modernos y ofrece, además de sus productos, servicios de catering, alquilar de vajillas, etc.
También tiene productos sanos, verdes, sin gluten, para cubrir todo tipo de gustos y necesidades.
Visita obligada en Madrid.
Aunque a veces está demasiado concurrido es inevitable, lo merece.
Para mí son recuerdos de mi infancia y juventud.
Es como trasladarse a otra época pasada.
A veces, simplemente paso, pero no puedo evitar contemplar con gusto el gran surtido de especialidades, elaboradas con mimo y profesionalidad. Es una garantía de calidad y productos con componentes sanos.

La chica por la tarde siempre es muy amable. Te hace el cafe en tu gusto! Un sitio muy agradable! Volvere siempre aqui!

Muy buen lugar: cafeteria, pasteleria y restaurante. Todo bueno y a precios razonables. Su menu del dia es destacable. Agradable y bonito local, sobre todo la zona de la pasteleria. Servicio atento y agradable

Coqueto y acogedor Viena Capellanes. El olor a café en el desayuno embriaga los sentidos. Hoy dia especial con las palmeras rosas a beneficio de la lucha contra el cancer de mama. Gran iniciativa y solidaridad!

Pasteleria de calidad con buen servicio y bien atendida. Estupendos los pastelitos, con el tamaño justo y con una gran variedad de sabores.
Las tartas son magníficas sobre todo la de queso con frambuesa y la Sacher.

Opino sólo sobre lo que consumo, en este caso el pan. Hace 7 años compré pan en este sitio y fue tan malo que no volví hasta hoy motivado por su «lavado de cara». Sigue igual de malo.

Experiencia desastrosa por la mala atención. Hemos estado más de 15 minutos con los platos sucios, terminado el menú, sin que ningún camarero recogiera la mesa a pesar de que miraban cada vez que pasaban. Cuando me he ido, sin tomar café dada la hora, uno de ellos estaba hablando con unas clientas. Para no ir si tienes que volver a trabajar.

Es un local muy agradable con unos camareros/as muy entregados. Es cierto que a la hora de comer se pasan algunos apuros pero es que la afluencia es masiva. La cadena Viena Capellanes ha mejorado muchísimo en los últimos años, con un salto de calidad en los productos palpable y un rejuvenecimiento en todos sus parámetros admirable. Es ejemplo de cadena centenaria que sabe mantenerse y mejorar. Yo soy adicto.

He estado en muchas cafeterías de esta cadena desayunando o merendando pero este ha sido el primero en el que entré para comer. Tienen un menú a un precio bastante aceptable. La calidad de los platos sorprende y puedes comer bien a un precio razonable, lo cual se agradece por la zona en la que se encuentra.
El servicio es lo que puede empeorar un poco la sensación con la que te marchas del lugar ya que no son demasiado amables y además pueden ser lentos si hay más de 4 mesas ocupadas.

Panadería-Pastelería
Perfecto para desayunos, merienda o fastfood.
Amplia variedad de productos salados y dulces.
Sus sandwiches aparentemente son como los de Rodilla.
Cuentan con ofertas llamativas de meriendas, pero que en realidad no son tan buenas como parece.
El mollete es de pésima calidad.
El servicio es pésimo y antipático.
Relación calidad-precio: caro

Es una pasteleria de toda la vida! Mi abuelita ya merendaba ahi a mediados del siglo pasado! Sigue teniendo el encanto y la calidad de siempre. Cuando estoy en Madrid no dejo de visitar este lugar emblematico. Disfruto sus sandwiches de vegetal, ensaladilla y atun y huevo. La tarta San Marcos es de las mejores que he probado.
El personal es encantador y su encargada en especial.

No he visto en ningun sitio de madrid una atencion por parte de su personal, mas eficaz, prifesional y sinriente que aquí. Enhobuena. Platos sanos y muy muy ricos.