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La vinoteca borboleta es un bar familiar con mucho encanto. La comida de raciones es estupenda y tienes un montón de opciones de vinos para acompañar. El servicio no puede ser mejor, siempre nos atienden con mucho esmero y cariño. Miriam es una sumiller extraordinaria. Seguiremos bajando a visitaros.
Las croquetas de cecina son una maravilla. Y los pechitos de pollo estaban crujientes, muy ricos. La atención muy buena, si eres amante del vino tienen mucha variedad.
Un sitio que nos gusta mucho tanto a mi chica como a mí. Yo no sé mucho de vinos, pero siempre me hacen unas recomendaciones estupendas. De comer recomiendo huevos rotos y croquetas de rabo de toro.
Muy buen sitio, soy vecino del barrio y cada vez que voy descubro más motivos para volver: atención super buena, selección de vinos, comida casera (la tortilla está increíble) uno de mis imprescindibles del barrio.
Mucha variedad de vinos. Buenas tapas. La tortilla de patatas riquísima. No son muchas mesas, depende del día conviene reservar. Menú del día. Son muy amables.
Muy buena atención y muy buen vino. La carta es una muy mona libreta con catas de cada vino escrito a mano donde se nota el cariño de los encargados. El local es un pequeño espacio que se ajusta a lo que buscas para tener un lugar tranquilo no muy abarrotado. Espero volver pronto.
Todo un acierto! Las croquetas de puchero están espectaculares, mi enhorabuena a la cocinera! Ademas de que la variedad de vinos es increíble. Repetiré!
Fuimos a tomar un café a la hora de comida. La señora mayor nos preguntó si íbamos a comer, le dijimos que a tomar café y de muy malas formas nos dijo que tenía que limpiar la mesa y que iba a tardar. Esperamos en una mesa sin abrir la sombrilla y sin limpiar a que la señora decidiera venir. Cuando decidió tomarnos nota, le preguntamos si podía abrir la sombrilla ya que nos daba el sol en la cara y nos dijo que no que como mucho que nos ponía la estufa. En resumen que si no vas a comer no te atienden bien. Fue horrible la gestión, el café malísimo y la vajilla rota. No lo recomiendo ni a mí peor enemigo
¡Me encanta! Soy una auténtica amante del vino y me cuesta mucho encontrar sitios donde tomar un buen vino, a un precio adecuado y que ofrezcan diversas opciones. Me habían hablado de esta vinotecas y no me ha podido gustar más. Aparte de que conocen los productos, disponen de las suficientes opciones como para poder elegir diferentes tipos de vinos y no los típicos. Me he quedado con las ganas de probar la comida porque olía que alimentaba. Volveré sin duda.
Sitio familiar super agradable. Todo está muy rico, el menú del día es como comer en casa. Nos tratan siempre genial, es nuestro sitio favorito del barrio
El mejor sitio del barrio. Los dueños y camareros son súper majos y atentos, y la comida espectacular. Los huevos rotos y los pechitos de pollo, fantásticos. Y el menú del día muy sano y muy rico.
Lo hemos visto de paso, invita a entrar por la decoracion y el ambiente. Nos hemos tomado unos vinos, gran variedad y calidad. Hemos recibido muy buen trato y seguramente volvamos para probar el resto de producto que tienen.
La camarera es muy agradable y el local es perfecto para tomar algo tranquilamente, a buen precio, como el resto de lugares de la zona. Además, con la consumición siempre te ponen algo de pincho.