Freiduría Pescadería Isla Plana
4 opiniones C. Isla del Elefante, Isla Plana, Murcia +34 660 02 91 42 Sugerir una edición
29 julio 2023 1:23
Un estupendo sitio para comer pescaíto. Eso sí, sólo tiene terraza y en época alta de turismo es mejor reservar ya que hay muy pocas mesas.
28 julio 2023 19:41
Un restaurante que no parece gran cosa pero que realmente vale la pena el viaje, ahora. No sé si es una particularidad del verano. pero la hay. al menos por la noche, pero imagino que a mediados de el día del desayuno es lo mismo. una restricción severa 1 hora y media para comer y dejar espacio para el segundo plato. es un poco bloqueador, pero la verdad el jefe nos dio más tiempo, estábamos celebrando dos cumpleaños, y los pescados y mariscos están para morirse, todo es fresco y delicioso. Intentar. Y déjate tentar. Pasaremos por alto los pequeños contratiempos probablemente debido a los locos que hacen cola para conseguir una mesa. Ve allí, pero sobre todo reserva. Un muy buen plan, créanme.
24 julio 2023 2:31
Lamentable de principio a fin. De 6 cosas que pedimos, no tenían 5. Nos adaptamos a lo que había, y no estaba mal (a excepción de la corvina, que estaba muy grasienta). El rodaballo muy bueno, y la fritura de pescado abundante.
El problema vino cuando, a las 22: 31 minutos (literal), vino dando palmas el dueño, diciendo que venga, que entraba el siguiente turno. Le pregunté si podíamos al menos tomar un postre, y me cantó los postres, y al preguntarle si la tarta que me dijo era casera, literalmente me respondió "a mí que me preguntas, vete a la pastelería donde la compro y les preguntas". Dicho esto, pedimos la cuenta y nos marchamos. Un sitio al que no pienso volver en mi vida, por la mala educación de una persona, al que le pagamos 96€ de cuenta (no era barato).
Es digno de mención que su hijo fue amable en todo momento, y se disculpó por su padre sin siquiera saber lo que había pasado. Una persona educada, y de la que su padre debería aprender un poco. Los camareros también fueron amables.
El problema vino cuando, a las 22: 31 minutos (literal), vino dando palmas el dueño, diciendo que venga, que entraba el siguiente turno. Le pregunté si podíamos al menos tomar un postre, y me cantó los postres, y al preguntarle si la tarta que me dijo era casera, literalmente me respondió "a mí que me preguntas, vete a la pastelería donde la compro y les preguntas". Dicho esto, pedimos la cuenta y nos marchamos. Un sitio al que no pienso volver en mi vida, por la mala educación de una persona, al que le pagamos 96€ de cuenta (no era barato).
Es digno de mención que su hijo fue amable en todo momento, y se disculpó por su padre sin siquiera saber lo que había pasado. Una persona educada, y de la que su padre debería aprender un poco. Los camareros también fueron amables.