La Fortaleza

Croquetas espectaculares. Tomate cartagenero muy bueno. Tan obligatorio pasar por aquí como por el Teatro Romano.

Local chiquitito con pocas mesas y taburetes. La carta pequeña porque es todo fresco del día. Ven pronto porque según se van acabando las raciones te quedas sin probarlas y es una pena porque está todo delicioso, nos quedamos sin poder probar el famoso revuelto. Nosotros probamos las croquetas de brócoli y queso azul, la marinera, la tapa de sangre frita con cebolla (aunque por el nombre nos daba repelús, estaba riquísima) y morcón blanco con almendrinas. Cualquier cosa que pidas, estará espectacular.

Croquetas espectaculares, tapas y raciones inigualables. Trato excelente y familiar. Recomiendo ir 100%.

Las croquetas espectaculares coliflor y cabrales, merluza con palitos de cangrejo, boloñesa. Perfectas el sitio para comer las croquetas y marcharte, con cola para sentarse. La señora que atiende muy amable, no puedo decir lo mismo de la chica joven, de ahí mis 4 estrellas, muy antipática, viendo la mesa sucia y pasando tres veces no se llevó ni un plato hasta que la señora de una pasada recogió y limpió. Pequeños detalles, si tienes público, CUÍDALO

Bastante maleducados. No me hicieron caso a pesar de que estuve un buen rato intentando pedir mesa y no estaban especialmente llenos. ¡Lamento mucho haber tenido esta experiencia aquí porque veo que tienen muy buenas valoraciones! Pero supongo que nunca llegaré a saber si realmente estuvo a la altura de mis expectativas. ¡No volveré!

Taberna muy acogedora, las croquetas increíbles al igual que la magra con tomate.
Pedimos también una tosta de sobrasada muy rica.

Pequeño restaurante en pleno centro de Cartagena. Comida casera y buenísima.
Muy bien servicio.

Voy a empezar con lo peor que es el local, demasiado pequeño, pero los buenos perfumes siempre van en frascos pequeños.
Desde que fui quiero ir todos los días a probar croquetas nuevas, están buenísimas, cremosas, tiernas a la vez que crujientes por fuera y exquisitas.
Los sabores de cada una de ellas están superconseguidos, seguro que todos sus platos están iguales de buenos, pero yo voy a ponerme hasta arriba de croquetas y luego si puedo, me pego una siesta sin alarma, y es que ser feliz cuesta muy poco.

Todas las tapas son de calidad y generosas, pero las croquetas son ESPECTACULARES y cada día de distintos sabores. Sin duda un lugar imprescindible de tapeo.

Croquetas variadas cada día. Nos tocó la de sobrasada y queso picante: maravillosa. El tinto de verano es de la casera. El revuelto cartagenero estaba bueno.

Maravillosas croquetas las de Loli. Además un trato muy bueno por parte de los trabajadores. Un sitio muy sencillo, humilde y con muy buen ambiente. Parada imprescindible en el tapeo cartagenero.

Croquetas. Algunas de las mejores croquetas que has probado en tu vida.
También tiene otras pequeñas exquisiteces que te alegran la visita.
Céntrico y bien situado, dispone de una mínima terraza, tres barriles, que permiten ver la fluida vida cartagenera, que desfila por su puerta.
El pequeño local, siempre abarrotado y bien atendido, respira una atmósfera antigua y agradable.
Prueba a ver.

Todo muy bien pero no recomiendo venir si eres madrileñ@ porque al parecer la gente de aquí es muy antipática con ellos.
Nos tocó callarnos mientras una mujer soltaba de todo sobre los madrileños, no obstante la camarera de 10

Estuvimos ayer en el bar, las croquetas eran de setas, espinacas y bacon y otras de morcilla. Estaban deliciosas, exquisitas. Además tomamos un par de tapas de tortilla que era casera, deliciosa, que me llevó a las que hacía mi madre y mi abuela. Un pisto cartagenero espectacular. Luego una tapa de almendras con longaniza que a mis cuñados e hijo les pareció deliciosa.
Volveremos este invierno a disfrutar de más sabores de croquetas, de tapas con sabor a las caseras de toda la vida y de la terraza. Siga haciendo con tanto amor las tapas y croquetas

Una pena, me habían recomendado el sitio. Sin embargo, por las medidas anti covid, no pudimos comer. Será hasta la próxima.

Local pequeñito y muy buena atención. Es famoso por las croquetas y merecen la pena. La variedad depende del día, nosotros probamos la de morcilla, la de boletus y la de espinacas y beicon. Se recomienda ir pronto por si se acaban. Tienen también sardinas ahumadas, pisto cartagenero, entre otras tapas. Muy bien de precio también.

Las croquetas hechas a la antigua usanza, la bechamel hecha en sartén, tan buenas como la de nuestra madre y no puedes comerte una sóla

Tremendas las croquetas.
Sitio pequeño y con mucha gente pero merece la pena.
De las mejores croquetas que he probado hechas en restaurante.
Las de zanahoria y curry están especiales.

Un sitio entrañable y con encanto. Esta en el centro, cerca del puerto, del ayuntamiento, del teatro romano, de la calle mayor. Tienen encanto sus carteles de corridas de toros en Cartagena, de los años cincuenta y sesenta. Todo es reseñable, el local, pequeño y ajustado, su pequeñísima terraza, su personal, una señora, su hija y un señor, los justos. Pero reseñables también son su principal producto, las croquetas, sin duda, las mejores de Cartagena. Todos los días se acaban, los tipos de croquetas son muy variados con un común denominador, están buenísimas y con calidad máxima.

Un lugar muy entrañable, se encuentra muy céntrico, cerca del teatro romano, el ayuntamiento, el puerto, las termas romanas, la calle mayor, la especialidad son las croquetas, caseras y de muchos sabores, de morcilla, de boletus, zanahoria, merluza, te las hacen conforme las pides, el trato genial y el precio razonable, lo recomiendo.

Con diferencia las mejores croquetas de Cartagena. Le recomiendo a todo el mundo pasarse a probarlas.
Típico rincón con encanto que tiene algo típico pero de muchísima calidad.

Croquetas. Algunas de las mejores croquetas que has probado en tu vida.
También tiene otras pequeñas exquisiteces que te alegran la visita.
Céntrico y bien situado, dispone de una mínima terraza, tres barriles, que permiten ver la fluida vida cartagenera, que desfila por su puerta.
El pequeño local, siempre abarrotado y bien atendido, respira una atmósfera antigua y agradable

Lo encontramos por casualidad junto al ayuntamiento para tomar un par de tapillas y nos encantó. Las croquetas de atún y piquillo exquisitas. Dos cañas y tres tapas 6€. Le trajeron unas galletitas de cortesía a mi hija, y buen trato, que es de agradecer. El único pero es la decoración taurina, que vi cuando ya estaba sentada, porque ni el nombre ni la fachada tienen ningún aire taurino.

Especialistas en Croquetas. Cuando llegamos ya era tarde y solo les quedaban de 2 tipos. Probamos las de boletus y estaban buenísimas! Merece la pena ir a tomarte algo acompañado de una buena croqueta.
El sitio por dentro está muy anticuado y poco acogedor, no es un sitio donde apetezca quedarse mucho rato. Pero por esas Croquetas vale la pena ir!

Las mejores croquetas con diferencia que he comido. Ir a probarlas yo desde que fui la primera vez. No he parado de ir.
Ricas no! Lo siguiente.

Es una coquetería, sólo hay croquetas caseras y alguna tapa, si eres amante de las croquetas caseras este es tu lugar, van cambiando los sabores a diario, y están de lujo.