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Comida buenísima. Vinos espectaculares . El ambiente inmejorable y las chicas encantadoras.no se puede pedir más. Servicio rápido. Todas las semanas repito.
Sitio con solera en lo que en tiempos llamábamos "Calle de las tascas". Tapas ricas. Son dos locales contiguos: el tradicional con la barra y otro con mesas que hace de comedor aunque pequeño y ruidoso.
Platos poco elaborados para el precio que tienen. No se come mal, pero creo que tampoco cumple las expectativas. Ejemplo. Postre, tarta de queso. Pedacito de tarta de queso pequeño con una cucharada de mermelada de bote echada al lado en el plato. Presentación muy pobre para el precio que tiene. Buena carta de vinos, eso sí. Y la ensalada también estuvo muy bien.
En La Taberna de Toni, Murcia. Este lugar está entre las Tabernas más antiguas de Murcia, es donde encuentras esa Barra magnífica y brutal, donde tienes unas conservas increíbles y todo el producto es de mercado, fresco y de calidad.
El Solomillo de Ternera con Foie es algo increíble, sobre una tosta perfecta, muy marcada por ese sabor a plancha. Lo demás todo riquísimo, y el trato de las camareras es excepcional. Son todo mujeres en la Taberna y muy trabajadoras, y siempre pendientes de todo. Me ha encantado este lugar, que es parte de la Historia de Murcia
Los precios por las nubes, tienen la poca cara de vergüenza de decir que una coja de espárragos cuesta 50€ teniéndola en el corte inglés a 17. La carrillera por dentro congelada y los montaditos pasados por no hablar de lo desagradables que fueron las camareras chillandose entre ellas. No volveremos, antes cuando estaba Tony era diferente.
No vale la pena por los precios ridiculos: lo que más nos sorprendió fueron las patatas con boquerones. Tienen la cara de cobrar 8€ por un plato de patatas de bolsa y 6 boquerones de lata. Los montaditos pequeñitos también y caros. No repetiremos
Un clásico de las tascas murcianas que ha visto días mejores. La relación calidad/precio de las tapas, regular (escasas y con una presentación algo pobre). El servicio pasable y, lo peor, la música chunta chunta a todo volumen, que en algunos momentos ni se podía hablar.
Aunque es una de las tascas clásicas, tenemos la sensación que esta en horas bajas, muy lentos para servir (en ese momento el sitio estaba medio lleno), platos escasos y relación calidad/precio algo bajo.
Trato de la dueña HORRIBLE. Estabamos cenando y fui a la barra a preguntar por el baño y la camarera me dijo: es que.están cerrados. (con cara de sentirlo) y yo: pero si estoy cenando aquí! (entendiendo que no dejaran entrar a alguien de la calle) y me dijo que preguntara a la dueña. Fui a ella amablemente: perdona, puedo entrar al baño? NO! Estan rotos. Respondió de malas y falsas maneras y se dio la vuelta. Una pena porque la comida estaba bien pero la falta de educación deja mucho que desear. Espero que solo fuera un mal día y me tocara a mi. Acabamos nuestra cena en otro sitio (Shooter's lab) que estaba mmmmmm y además majisimos!
Me encanta este sitio. Estuvimos el otro día y una vez más estuvo a la altura. Encima, ha moderado los precios, imagino que porque no los sube desde hace tiempo. La calidad de la comida y la velocidad del servicio son encomiables. Una de esas cartas que siempre se agradecen por los toquecitos de calidad que tiene. Muy recomendable.
MUY CARO Y BAJA CALIDAD! Hacía tiempo que no pasaba y vaya bajón de calidad que ha dado. El solomillo de ternera durísimo y seco, el tomate con bonito ya no es Muchamiel, era tipo Mercadona, y el solomillo con almendras había que buscarlo debajo de la salsa. No volveré.
Sitio tradicional de murcia, hay que reservar porque se llena. La comida muy buena repetimos carrillera, solomillo con salsa de almendras y la mini hamburguesa. Los postres están muy buenos. Siempre que vamos disfrutamos! Además buena variedad de vinos! Un lugar al que ir sin duda!
MALA EXPERIENCIA. Hemos cenado con un servicio bastante que desear, muy lentos y malas formas, producto normal y precios desorbitados. Desde luego que no volveré y no se lo recomendaría a nadie.
Mítica taberna donde degustar un buen vino con su tabla de quesos que es espectacular, además del solomillo en salsa de almendras, riquísimo. Es muy acogedora y el trato de 10
Todo exquisito. Lo malo es que el jefe amenaza con ponerse corbata, dice que daría otro giro a la empresa, hoy los jóvenes piden ser servidos con corbata. Yo creo que es un exceso.