Oficina Banco Santander

Tienes que pagar Las multas en entidades bancarias privadas. Así que vas, que y te dicen que solo tienes dos horas a la semana para pagar porque no eres cliente.
Menudo servicio

Sólo vengo aportar una queja a montón más de otras quejas y poner la puntuación de este banco un poco más al nivel que le pertenece.

Tratado con Esther una persona que no debería atender al público a menos que le hagas trabajar por la competencia!

A pesar de la escasez de empleados, la Sra. Subdirectora, todo competencia, atención y paciencia. Muchas gracias.

Me tuve que personar para preguntar una cuestión, puesto que no tienen atención telefónica, te atiende una grabación que por supuesto nunca te devuelve la llamada. Pues bien, al llegar me atiende la cajera de muy mala manera, rozando la mala educación e invitándome a que me cambie de sucursal, cosa que por supuesto pienso hacer, e invito a la gente a que lo haga, no es tan difícil. Me he quedado muy sorprendida del trato recibido, no entiendo como habiendo gente con ganas de trabajar ponen a estas personas de cara al público. En fin, algo debe pasar cuando en todas las reseñas se habla de un trato similar. Mañana mismo trasladaré todas mis cuentas a otra sucursal pues se ve que la sucursal de Torre de Romo le incomoda atender a los clientes con simpatía. Como anécdota os diré que iba acompañada de mi hija y al salir me ha dicho "¿mamá cómo has permitido que te hable así?

Necesitan abrir otra caja. Una sola persona no es suficiente para atender a toda la gente que se puede juntar allí. Ingresar un simple cheque es una odisea.

Que poca vergüenza. Hay un cartel diciendo q en estos dias abren hasta las 12.30 y a las 12.00 ya no habia nadie. Un horror de banco en general y de oficina en particular. No dan más q problemas, busquemonos otro banco porq este es un mojón

Estoy indignado por la actitud brutal, apático e insolente la persona con gafas que está en la mesa izquierda en esta oficina.

Desconozco el motivo pero todavía no he conocido a un cajero de este banco que te atienda con una mínima sonrisa. Te vas con la sensación de que molestas.