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Si eres empresa y necesitas un sitio donde cenar este no es tu sitio, el dueño un desagradable que a pesar de pedir factura para la empresa de manera amable, su respuesta fue, con el tíquet de caja os sobra. Pues para su información y parece mentira que usted tenga una empresa, con el tíquet de caja no vale para una empresa.
Además de ser un clásico logroñés, es un SITIO ÚNICO EN EL CONJUNTO DE ESPAÑA. Un templo de la cerveza con casi 40 años de historia, donde los camareros son auténticos maestros del arte de servir la cerveza.
En estos tiempos no es difícil encontrar "cervecerías" al calor de las modas hipster, más centradas en una barra de pinchos tipo Donosti que en su cerveza. O directamente son Irish Pub, con decoración copiada y pegada, y la misma originalidad que un restaurante chino.
Pero "la Inter" no es uno de esos lugares. El equipo que lo regenta lleva muchos años dedicándose a esto y se nota, están dispuestos para aconsejarte y charlar sobre cerveza, lo que ha hecho que a lo largo de los años tengan unos parroquianos siempre fieles.
Desde la cristalería, siempre adaptada al tipo de cerveza, hasta la comida que hace el maridaje perfecto, pasando por la decoración clásica y austera, todo en este bar te invita tener la mejor experiencia cervecera.
Después de años buscando templos como este.debo decir que no se los encuentra fácilmente. Aquí se eleva la cerveza a otro nivel
Muy buena experiencia. Muy familiar la verdad, es lo que me gusta. José Luís un experto en cerveza, cosa que se agradece de manera especial. Para mi es una gran ayuda. Y luego la comida genial, Jesus en la cocina preparo una estupenda salchicha y después una hamburguesa en su punto. No puedo pedir más después de 1120km. Se agradece el trato y la atención. Para volver siempre que se pueda.
Lamentable el trato recibido por el staff. No recomendable si vas con niños. Buena cerveza, me da pena pero no volver a este lugar, tras cuatro rondas nos han echado de malas maneras, hay mejores cervecerías en logroño sin duda. No volveremos.
Local decente, eso si, camarero borde, rancio, seco, desagradable y sin don de gentes. Mas vale tomarte algo en un parque. Posdata: el aire acondicionado no lo ponen, ni con 40 grados.
Local tradicional donde los halla, la estética no ha cambiado en los últimos 20 años, pero no por ello deja de ser un lugar agradable entrañable familiar y sobre todo para muy exigentes en la cerveza, sabiendo que sus necesidades alimentarias pueden estar cubiertas por la amplia variedad de Frankfurt que ofrece la plancha, ninguna de ellas desdeñable, amén de multitud de pinchos variados cualquiera de ellos apetecibles a la vista y al gusto en el caso de catarlos
Es un centro de culto del heteropatriarcado y se respira testosterona. Ambiente cerrado. Si no eres de sus parroquianos habituales te miran desde la barra y las mesas como si entraras en un saloon del Oeste. Nunca me he sentido cómodo y los camareros tampoco es que pongan mucho de su parte para hacer tu visita agradable.
Muy buen sitio, donde tienes variedad de tipos de cerveza, servida por personal con amplio conocimiento a la vez que buen trato. Para ir a degustar una buena cerveza y aprender sobre ese mundo. Recomendable al 200%
Buen ambiente. Variedad de cervezas y un buen sitio para cenar una hamburguesa o un bocadillo. Jesús y José atienden fenomenal y son unos profesionales tirando cervezas.
Gran variedad de cervezas de importación donde elegir. Siempre me han gustado las que he elegido. La zona en la que está ubicada no es de las que más me gusta de la zona.
Una sitio para poder disfrutar de una buena cerveza y también para comer algo. Darle las gracias al gran Profesional de Jesús y a su sobrino Jose, por su amabilidad y atención. (probar las croquetas y la tortilla)
Sitio amplio y con gran variedad de cervezas artesanas de la zona norte y esilos belgas de toda la vida tipo st bernardus, westmale, chimay. Etc. Decorado con carteles de cerveza. Sitio muy agradable para disfrutar de una buena cerveza