La Casa de la Tia Quica

Un pueblo muy bonito, para pasear, tranquilo. En cuanto a la casa, es acogedora, pero en nuestro caso la limpieza brillaba por su ausencia y estába un poco descuidada. En pleno noviembre y con temperaturas bajas nos quedamos sin calefacción, ni agua caliente. El tema de los baños deja mucho q desear, muy mal organizados, en mi caso el lavabo está en una parte, inodoro y ducha en otro, pero separados por una cortina. Intimidad nula a la hora de usar servicios y ducha

Un lugar muy bonito y tranquilo para pasar unos días, la casa esta bastante bien para mi gusto un poco recargada en cuanto a decoración y un poco oscura, creo que con un color blanco o claro y sin tantas casas daría sensación de más espacio. Por lo demás bastante bien y la duela muy amable y conpetente.

El pueblo es muy bonito, pero respecto a la casa: la cocina se hace pequeña (nosotros éramos 11) y no me convence que el váter esté dentro de la habitación sin puerta de separación (hay una cortina), lo mismo la ducha.

Casa acogedora, muy optimizado el espacio, enclave espectacular, pueblo precioso, vistas y paseos de ensueño, ermita de Santiago, embalse de Mansilla, picos de Urbion, laguna negra. Muy recomendable.

Es una casa preciosa, y un pueblo muy bonito, ideal para desconectar en plena naturaleza con niños, animales, con familia, con pareja o solo jeje. Y Sara (la dueña) es un encanto de mujer, super atenta y servicial para todo

Intentamos reservar para Mayo y resulta que no tienen a nadie para que atienda la casa. Que hasta verano nada. En fin.

Tengo que dejar aquí escrito que Sara la propietaria de la casa, fue desde Anguiano hasta Nájera a las 20: 00 de la noche el domingo solo para darme el muñeco con el que duerme mi hija que nos habíamos dejado en la casa y todo con una sonrisa en la cara! Un amor de mujer.
MUCHAS GRACIAS SARA!

Sara nos atendió genial y nos hizo sentir en casa. Si quieres desconectar es un pueblo muy bonito y tranquilo.

Buscábamos una casa rural y ha resultado ser mejor de lo que esperábamos.
Sara la dueña de la casa es maravillosa, atenta y un encanto de persona. La estancia allí ha sido para nosotros muy, muy excelente.

Pueblo muy tranquilo, ideal para desconectar. El personal de la casa es fantástico, te hacen sentir como en casa.

Lugar muy recomendable para pasar unos días. En La montaña Riojana con pueblos esperando a ser descubiertos. Esta casa ubicada en Viniegra de abajo cumple con todas las espectativas. Y un recuerdo para su propietaria Sara que hace que la estancia se convierta en una experiencia que anima a volver a todos los visitantes.

Un lugar encantador. Las habitaciones son preciosas y muy acogedoras, sara es una anfitriona encantadora y nos hizo sentir como en casa desde el primer momento, la comida fue sencillamente estupenda, y el pueblo es impresionante. Sin duda, un sitio que visitar si se va a la rioja.

Gracias Sara por este trato tan humano y personal, por ese café intenso, por esas sugerencias de qué hacer y a donde ir.

Nos dió mucha pena solo haber estado un par de dias, pero los suficientes para recomendar tu casa, la tranquilidad de la zona, y el silencio, frescura de las noches de verano.

Una delicia!

Bonita casa y acogedora. Sara da un buen servicio y trato amable. El pueblo de Viniegra de Abajo es encantador y muy recomendable para ir con niños.
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Una escapada en un entorno precioso.una casa llena de encanto con unos dueños magnificos.gracias por hacernos pasar unos dias inolvidables! Un besazo para bola tambien!

Una casa muy bonita en un pueblo precioso y súper tranquilo, el sitio perfecto para desconectar. Sara y Ramón son encantadores. Te dan toda la información de que hacer por la zona. Y el trato es inmejorable. Un sitio para volver.

Fue cómo estar en mi propia casa, perfecta para disfrutar de unos días de relax en una de las zonas más bonitas de La Rioja. La dueña es un encanto y pudimos disfrutar una cena con el resto de huéspedes muy amena.