Monasterio de San Prudencio

El sendero está bien señalizado y en el primer tramo hay valla para poder agarrarse, ya que es una bajada muy pronunciada a lo que se suma el desgaste del camino por las lluvias y que a la vuelta se convierte en una subida que requiere bastante esfuerzo. Sendero muy estrecho y con mucha piedra suelta con posibilidad de resbalar y caerte. De cuatro personas que íbamos, tres han dado culetada. Las ruinas del monasterio, son muy bonitas, sería bueno que tuviera un mínimo de conservación para poderlo visitar sin tanto peligro. Recomendamos buen calzado y llevar agua, porque no hay fuentes por el camino, aunque si bancos para ir descansando.

Monasterio de San Prudencio. Se puede llegar a los restos de este monasterio desde el pueblo de Ribafrecha, ascendiendo por un sendero muy turístico. Se coge, pasado el pueblo, en una curva de la carretera. Luego te toca bajar. Desde El Clavijo, descendiendo por un sendero modernamente preparado. Después te tocará subir.

Ruinas de un monasterio que dominó el valle del Leza, y que quedó abandonado tras la desamortización de Mendizábal. Actualmente se accede desde una senda vallada que arranca de la salida de Clavijo, en el camino que lleva a la ermita de Santiago y al monte Laturce.
Tiene unas dimensiones considerables, buenas vistas al valle del Leza y dos dolinas, y junto al edificio hay una cueva, origen legendario del monasterio. Se encuentra en estado de ruina, manteniendo algún muro, el arco ojival de la capilla, y parte de una celda que aún conserva el techo.
El camino que lo conecta con la carretera de Leza está cortado por una valla electrificada, por lo que la visita se hace desde Clavijo. Ruta interesante.

Es toda una sorpresa encontrar semejantes ruinas en medio de la nada.
Se accede tanto desde Clavijo como desde la carretera a Soto.
Recomiendo esta última ruta porque el paseo también merece la pena.

Precioso recorrido desde Ribafrecha hasta Clavijo, pasando por las bellísimas ruinas de este monasterio.

Un paseo corto pero intenso por la bajada inicial y la subida de vuelta pero merece la pena ver las ruinas del monasterio por la tranquilidad del lugar y las dimensiones de las ruinas.

Se trata de una ruta corta para una escapada rápida a la que podemos sumar un picnic.
Con motivo de la erosión creada por la climatología no es para todos los públicos.
Para llegar al monasterio tenemos que realizar una descenso casi continuo, por lo que el regreso ha de ser en subida.
Las ruinas mantienen casi todas las murallas, por lo que podemos observar varias estancias. La pega es que se encuentran comidas por la naturaleza.

Un sitio precioso, entre montañas, con vistas muy bonitas. Hicimos el recorrido desde Clavijo y nos encantó. El monasterio es impresionante, una pena que no esté mejor conservado. Imprescindible buen calzado, hay mucha piedra suelta y te puedes dar una buena culada

Un bonito paseo desde el pueblo de Clavijo hasta las ruinas del Monasterio, no le pongo las 5 estrellas porque el camino tiene zonas complicadas por el desgaste de las lluvias y el torrente de agua que ha excavado el centro del camino haciendo complicado caminar por él, por lo demás está muy bien para pasear por la naturaleza con unas vistas muy bonitas.

Muy chulo para pasar la tarde de ruta.pero hay que tener cuidado ya que es bastante pronunciado y el camino en tramos es accidentado.

El lugar es precioso, seria ideal poder pasearlo completo pero esta totalmente abandonado y cada día más derruido. Deben hacerle el mantenimiento mínimo de quitar las zarzas y la maleza tan alta que está en todos los lugares y hace imposible recorrerlo. Es una lástima se deje destruir esta belleza.

Una caminata de 1 hora, se necesita zapatilla cómoda porque hay muchas piedras en camino. No es camino muy duro, se puede visitarlo incluso con los perros.

Lugar mágico escondido en medio de los montes, su estado es aceptable para su abandono, invita a la reflexión sobre todo lo que poseemos queremos y quisiéramos.

Ruinas espectaculares de este misterioso y antiguo monasterio en ruinas merece más que la pena su visita después de pasear por el castillo de Clavijo.

Es una buena ruta tiene buenas vistas pero tiene que mejorar los accesos son un poco complicados conviene ir con un calzado bueno porque hay piedras en el camino y es una bajada desde la ermita un tanto fuerte y luego al final ya se llega al monasterio que está totalmente en ruinas y queda al mediodía así que es una forma bastante soleada luego alrededor hay otros caminos que también probablemente sean rutas que al final lo acaben en Clavijo merece la pena hacerla en un buen día

Monasterio en ruinas. La ruta circular desde Clavijo son 5 kms. Tiene subidas y bajadas pronunciadas.

Si no estuviera en España, estaría en mucho mejor estado. Está en completo abandono. Cuando estaba en pié debió ser impresionante.

Acceso un pelín complicado. Empinado pero merece la pena. Puedes ir con la familia.con cuidado si hay niños.pero no te arrepentirás.

Haciendo senderismo desde Ribafrecha a Clavijo en La Rioja, y bajando por la vertiente del Leza, una sorpresa inesperada las ruinas de este Monasterio al pie del monte Laturce.

Muy difícil encontrar aquí aglomeraciones. Se palpa eso de: "el tiempo que todo lo puede. "

Busto de San Prudencio situado en la concatedral de Santa María de la Redonda de Logroño.
Aunque el suceso fundacional pasó a finales del siglo vi, no se tiene constancia de la existencia del mismo hasta el siglo x con la reconquista del valle del río Leza. Aunque inicialmente tuvo mucho protagonismo en la repoblación de este valle, posteriormente perdió poder, e incluso sus moradores se sometieron al monasterio de Albelda desde 950 hasta 1058 por lo delicado de su ubicación en zona fronteriza.

Los propietarios del monasterio, los señores de Cameros tuvieron ahí su panteón. Diego Jiménez —que sucedió a su hermano Pedro Jiménez en el señorío— y su esposa Guiomar Rodríguez de Traba, refundaron el monasterio en 1181 y lo entregaron al monasterio de Santa María de Rute de la Orden del Císter que había sido fundado en 1162 por Pedro Jiménez, su hermano Diego y la hermana de ambos, Teresa, junto con su esposo Lope Íñiguez de Mendoza, señor de Llodio. 1​ La donación del monasterio de Monte Laturce al de Rute estipulaba que los monjes de este último monasterio se trasladasen al de Monte Laturce como comunidad cisterciense. 2​

Más adelante varios monasterios menores, e incluso las parroquias de Villanueva de San Prudencio, Ventas Blancas y Lagunilla del Jubera estuvieron a cargo del monasterio de Monte Laturce.

Además de las reliquias de San Prudencio —aunque puede ser que la mayoría las trasladasen al de Santa María la Real de Nájera— también poseía las de san Funes y san Félix del Monte.

Inicialmente estuvieron bajo la orden de San Benito, y en 1181 cambiaron a la cisterciense.

Con la desamortización de Mendizábal, en 1836, fue abandonado y sus posesiones enviadas a la Concatedral de Santa María de la Redonda de Logroño. Actualmente se encuentra en ruinas y forma parte de la lista roja de patrimonio en peligro de España.