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Es un un lugar donde lejos de animar a la lectura y el estudio, sucede todo lo contrario. Honestamente creo que es una lástima, ya que la ubicación, el edificio y el fondo son estupendos. Pero la simpatía y las ganas de trabajar de sus empleadas deja mucho mucho que desear.
También, el horario de apertura y la oferta de actividades es muy justa.
En este lugar parece que desconocen el significado de hablar en voz baja, sobretodo las responsables de este espacio al que llaman biblioteca, pero más bien parece un bar, solo le falta la barra.
La verdad es que está bastante bien, tienen dos zonas una en la entrada y otra un poco más alejada (está bien para estudiar), mucha gente habla del ruido y la verdad es que considerando lo pequeña que es, es normal que se escuche a veces a la gente hablando cuando les preguntan algo, yo desde luego repetiré.
Es con diferencia la peor biblioteca en la que he intentado estudiar, y digo intentado porque nadie guarda silencio, tampoco hay una sala de estudio apartada ni separada, el horario es pésimo. Una pena, jamás volveré.
~Horario de apertura: tarde, deberían abrir un poco más pronto como toda biblioteca hace. ~Silencio en la biblioteca: nula, si no son usuarios que no entienden que en las bibliotecas se va a estudiar o a leer y se debe de estar en silencio son alguna del propio personal. ~Atención del personal: tres personas, dos de ellas muy agradables pero una de ellas como dicen la mayoría de asistentes, una mujer borde, prepotente y con poca empatía. ~Biblioteca: bonita, tamaño mediana y con mucha luz. Sería perfecta para poder disfrutar de leer libros en silencio o para estudiar.
Me parece increíble que una biblioteca abra a las 11: 00 de la mañana, eso donde se ha visto? Es una vergüenza. Eso no lo ve nadie? Cuando he visto el horario no lo podía creer. No tiene sentido una biblioteca con ese horario, los estudiantes deben tener herramientas de estudio, y aquí no se les facilita ninguna. Es una pena para una biblioteca tan bonita.
Sin embargo, una biblioteca pública municipal deja de cumplir el derecho a la información, la educación y la cultura cuando está haciendo propaganda política indirecta. Un lugar donde en vez de fomentar el pensamiento crítico con diversidad de fuentes bibliográficas se vuelve en ACTIVISMO POLÍTICO, lo cual se sale de la neutralidad y la norma.
Plus. Los problemas de cada uno se dejan en casa (bibliotecarias).
Es una auténtica vergüenza ir a estudiar a esta biblioteca. Le gente entra y no conocen lo que es mantener el silencio, incluso los propios trabajadores no ayudan a ello.
Si quieres ir a echar la mañana como si estuvieses en el Mercadona perfecto. Si quieres estudiar, olvídate.
El problema principal es que no se puede ni leer ni estudiar: no existe una separación entre la "sala conferencia" con el resto de la biblioteca, con lo cuál durante los eventos no hay ni silencio ni tranquilidad.
Además, la página web es muy antigua y, a pesar de ser muy básica, resulta difícil de "manejar".
Es una pena porque la biblioteca es muy bonita, la iluminación es óptima y, a pesar de ser pequeña, posee una amplia colección de libros.
Es un lugar tanto de estudio como de lectura. El problema es el tema de la impresora el cual el problema es que no se pueden imprimir mas de 20 folios; y el tema del carnet que caduca cada año y tienes que hacerte uno nuevo cada vez que sacas un libro.