Bingo Sala Monaco

La simpatía de algunas personas que hay repartiendo los cartones, a veces brilla por su ausencia. Nos obligaron a buscar sitio en la zona de abajo, para después de comprobar que no había sitio, permitirnos subir a donde ya habíamos visto inicialmente.
Estaría bien que la persona que destinen a cantar las bolas, vocalice correctamente y con ganas.
La pantalla de la mesa no funcionaba y la de arriba se veía la mitad de la bola.
Un desastre, la verdad

Las instalaciones un poco antiguas falta una buena renovación, pero tiene buen ambiente y su servicio de cafetería a mesa muy bueno a buen precio

Ideal para pasar un buen rato, tomando algo si lo deseas y, si tienes suerte, llevarte algo de dinerito. Eso sí, con control y cabeza para no enviciarse.

Lugar ideal para pasar un buen momento, todo el personal genial, si lo modernizarán un poco ya sería espectacular

Fatal. Nos hablaron de forma muy maleducada. Nos dijeron que no podíamos cenar si no jugábamos durante una partida y cuando pedimos el cartón nos echaron porque “no hay casi gente y queremos cerrar”

No se como serán los demás Bingos, pero entrar en este es como volver 30 años en el pasado. La ilusión se va enseguida a ver como está gestionado: Fuimos 5 amigos con la intención de jugar y cenar algo y por como nos trataron, ni una cosa ni la otra. No sirven comida si no juegas y no te dejan jugar porque ya querían cerrar, siendo las 10h y cerrando a la media noche. Ya entendimos porque la sala estaba casi vacía. Una pena

Preguntamos en la entrada si podemos pasar, jugar y cenar y una vez dentro ni una cosa ni la otra alegando que ‘hay poca gente’. Explicaciones deficientes y trato regular.

Una de las que canta bingo canta súper mal, y no se le entiende. Luego, cuando vende cartones los reparte con muy poca educación.
Sin embargo las otras mujeres súper amables.

El bingo de toda la vida, el que mola, nada de cosas digitales. Como teletransportarse a los años 80

Són molt bona gent, en general la sala és bastant vella, està clar que necessita un rentat de cara però els treballadors fan que et sentis bé.

Instalaciones muy viejas, las vendedoras y los camareros genial. Pero los gerentes no obligan a nadie a usar mascarilla.

Una de las que canta lo hace fatal, se equivoca y aparte no se la entiende nada. Eso sí, las chicas que reparten y la de la entrada muy majas. El camarero muy simpático, además sale muy barato cenar ahí.

Bien, la atención del camarero muy bien, la sala antigua y la verdad que cantan mal los numeros

Muy bien para pasarte un ratito tomando un café y jugando unas partidas. Son bajitos los bingos pero si pasa el rato igual

Un lugar muy amplio en estos momentos difíciles, donde se puede pasar un rato chulo. Lo recomiendo

Buen sitio para pasar el rato con amigos o con la pareja
No se llena mucho pero lo pasas bien
No es que sea el mejor del mundo pero la atencion es de primera mano
Todos muy simpaticos

Para empezar mucha gente no lleva la mascarilla o la lleva mal puesta y en cuanto a la distancia pues tres personas en una misma mesa, la verdad no les separa el metro y medio que hay establecido por el gobierno y por sanidad.
Así como tampoco veo correcto que no tengan limite de aforo establecido para la gente.
Así que en mí opinión no cumplen absolutamente nada, ya que hoy estado yo y estaba lleno.

Parece un velatorio, ambiente triste, anticuado y desfasado, pero para pasar un rato y tomar algo, se puede aguantar.