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Hemos comido hoy por primera vez y hemos quedado gratamente sorprendidos. Todo lo que hemos pedido estaba riquísimo (tellinas, sepia con mahonesa de pulpo, paella de pollo y conejo) y la atención amabilísima. Totalmente recomendable. Volveremos seguro.
Bons arrosos i entrants típics amb un toc d'originalitat. Terrasseta agradable i preu correcte, tot vora mar. L'únic però es que cal fugir de la zona abans que s'en vaja el Sòl.
Una arroceria con muy buenos arroces y tapas, un pero una salsa que acompañó a los buñuelos de gambas al ajillo, fuertísima de pimentón picante, tuvimos que pedir hielo porque una comensal aunque no es alergica (aunque tampoco lo ponía en la lista de alérgenicos que llevaran pimentón, ni en los ingredientes de la tapa) pero su lengua es detectora del pimenton picante y si es en exceso se le inflama al momento. Bien podrían los camareros avisar de algún ingrediente escondido puesto que las bravas si le sugerimos que si llevan Ketchup lo prepararan aparte, pues un poco si nos fastidió la comida puesto que no sabíamos como iba a evolucionar la lengua, pero fue bajando gracias al hielo.
La comida excelente, el chico que nos a servido es súper majo y el ambiente es perfecto y nosotros que hemos estado con perro Le han puesto incluso dado agua. Es súper recomendado
Agradecida por el buen servicio ya que la amabilidad no es solo a los clientes, sino a Nuestras mascotas, que les dejan no sólo pasar, y son Bienvenidos, sino que les traen agua y todo. MIL GRACIAS POR ELLO!
Excelente cocina tradicional (arroceria) con tapas de aquí fusionadas con sabores y propuestas originales: p.e. Sepia fria con salsa de lima y albahaca, calamares con cebolla hechos al wok con salsa de cacahuetes, o focaccia con berenjena, etc. Vale la pena probar tanto sus entrantes (huid de los gustos convencionales) como apostar por cualquiera de sus arroces. Para aquellos/as que sois comedores/as podéis atreveros con una combinación de ambos. Atención: No descuidéis sus postres, me gusto mucho su tarta de Lotus.
El lugar está bien, tranquilo, si no es festivo, pero la comida es chusquera y cara, arroces en 10 min solo pueden ser precocinados, y algún producto podría ser hasta dañino (cangrejo). Para comer a lo gipsy no necesito restaurantes
Salimos encantados. Súper amables y tapas ricas muy ricas. Nos atendió Juan, encantador, súper educado y aunque era San José y estaba lleno hasta los topes, fue muy profesional y muy majo. Siempre sonriendo.
Los empleados muy eficientes y agradables. Pedimos paella valenciana, estaba pasable La tarta de queso espectacular Las raciones generosas y buen precio