DomusVi Ciudad de las Artes

Estoy terminando las prácticas de enfermería en esta residencia y no puedo estar más encantada de haber escogido este sitio desde el primer día. Me habían hablado muy bien, de como es el ambiente y el compañerismo que hay. Y eh de decir que el ambiente que hay es fabuloso. He aprendido muchísimas cosas nuevas y eh estado trabajando muy a gusto, me llevo en el corazón a todo el equipo (enfermeras, médicos, auxiliares, coordinadores, etc), todos los momentos vividos y anécdotas. Y por último decir, que el trato con todos los residentes en general es genial. La recomiendo.

Mi abuelo pasó sus últimos años en esta residencia, y no podemos estar más satisfechos con la elección que hicimos.
Siempre que lo hemos visitado hemos visto que el personal del centro cuida hasta el más mínimo detalle para que los residentes estén lo mejor posible y siempre han respondido con rapidez ante cualquier duda o problema.
Durante estos años hemos visto a mi abuelo muy feliz allí, y por eso estamos muy agradecidos con la residencia y con todo su personal.

He trabajado allí durante más de año y medio y si en su día necesitara buscar trabajo será al primer sitio al que volvería. He trabajado muy a gusto, con un@s compañer@s que valen un montón y a l@s que echo mucho de menos. Sin duda alguna en la residencia donde más me ha gustado trabajar. Empiezo nueva etapa que ojalá me vaya bien, pero si no fuera así, con mucho gusto volveria por si necesitaran personal.

Gracias al equipo médico y a todo el personal en general, por las atenciones para con nuestra Madre en los días previos a su fallecimiento.

Super contentos con el trato recibido por parte de todo el equipo de la 4 planta. Mi abuela Pilar ha estado en todo momento atendida a sus necesidades. Un abrazo

Residencia deleznable. No confiar el cuidado de vuestros mayores a estas residencias. Nada profesionales. Muy peligroso. Huir!

Os cuento mi caso.

Mi hermana estuvo en el centro durante algunas semanas de diciembre del año pasado y enero de este año. Entró para la rehabilitación de su pierna derecha tras serle implantada una prótesis de rodilla. Ella estaba totalmente capacitada para andar y de hecho se le incluyó en la planta de autónomos según se acordó. Se les entregó posología de la medicación que estaba tomando en ese momento.

Durante su estancia en el centro:
No realizó correctamente la rehabilitación periódica que mi hermana requerías y que el primer día se acordó, limitándose a un rato por la mañana y sin supervisión.
A pesar de la orden expresa de que ella se levantaba por las noches a orinar y acordamos que una asistente le ayudaría, se le puso pañales para que no se levantase por las noches.
No se le administró correctamente la medicación.

Como consecuencia de todo ello:

Presuntamente se le administro mal la medicación prescrita que se dejó indicada.

Salió de centro sin poder andar por sus propios medios o con ayuda del andador, pasando a ser una persona totalmente dependiente.

Igualmente la incontinencia de orina y, al principio también de defecaciones, ha requerido que, desde la salida de centro Domus VI, Rosa Victoria requiera del uso de pañales, el primer mes todo el día y actualmente solo por la noche.

Esta dependencia ha implicado la necesidad de cuidados continuos por parte de una asistente interna durante 24 horas.
Así mismo ha requerido la asistencia a domicilio semanal de un psicólogo y un fisioterapeuta 3 veces por semana.

A cambio mi hermana ha recibido una factura de importe DESORBITADO por unos servicios que no han conseguido el objetivo que se acordó, la rehabilitación de mi hermana de su dolencia, sino todo lo contrario, convertirla en una PERSONA TOTALMENTE DEPENDIENTE.

Esto es lo que puede pasar con vuestros familiares. Ha pasado con el mio.

Lo dicho: HUIR!

Hoy 15/11/2023: 2 años despues de lo relatado
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Hemos recibido una llamada del equipo de abogados, muy prepotentes, en la que se nos dice que van a iniciar acciones legales.

No creía que llegaríamos a esto; no era mi intención; pero dado que mi hermana se encuentra en estado de discapacidad total como consecuencia de la estancia en la residencia y, dado que poseo justificantes médicos de todas las lesiones que le provocaron en la residencia, iniciaré acciones legales reclamando daños y perjuicios si es necesario.

No tenía ningún interés económico en esta demanda, bastante daño moral han causado, pero dada su actuación poco ética, procederé a reclamar daños y perjuicios causados con carácter retroactivo.

Informaré de lo que sucede a través de esta reseña.

Si de verdad queréis a vuestros familiares, mirar por su bienestar, y vuestra tranquilidad, pero os puedo asegurar que aquí en Guantanamo no lo vais a encontrar.

Estuve esta semana en esta residencia, dado que nos invitaron para actuar por su aniversario. Tengo que decir que además de ser un centro muy bonito, limpio, me gustó mucho ver el trato cercano del personal hacia los mayores que estaban atendiendo. Ademas nos trataron muy bien, todos muy amables.

Mi cuñado estuvo 15 días. Estaba operado de una rotura de cadera y un día, de repente, estaba con la cadera luxada. Tuvimos que llamar a una ambulancia y operado de nuevo de urgencia. Según el cirujano, la prótesis sólo podía haber fallado por un movimiento brusco. La residencia no sólo se limpia las manos, sino que nos envía burofax exigiendo el pago de esos 15 días (1.300 euros). Hablamos con ellos por las buenas. Sensibilidad cero. Claro, la residencia es de la hermanas Koplovich. Tienen un equipo jurídico poderoso, preparado para resolver cualquier supuesta negligencia. Se salen con la suya. No me cabrían los insultos si aquí me lo permitiesen. Dejo solo uno: MISERABLES.

Me encanta el trabajo que hacen en esta residencia con los mayores, destaco la labor de las auxiliares cada dia, recomendada 100%

Con los precios que tienen me parece totalmente inadmisible que no ofrezcan, ¡¡¡ni pagando, un servicio de transporte domiciliario al Centro de Día. Esto deja sin ninguna opción al ingreso de mi padre cuya movilidad es casi nula. Espero tomen nota de casos como este.

De todas las resistencias en las que he estado es la mejor encuanto al trato con los residentes, un lugar muy limpio y moderno, pero el trato a los trabajadores es indignante y esclavizante encuanto a los horarios, el compañerismo es prácticamente inexistente.

Mi abuela entró con andador y ahora anda sola. Está muy cuidada y después de dos años allí no tenemos ninguna queja.

He sido una paciente de la residencia Domus Vi Ciudad de las Artes.

Entré por mi propio pie, para rehabilitarme de una operación de prótesis de rodilla.

He estado 5 semanas y en ese tiempo:
- He salido en silla de ruedas
- Necesito pañales a diario
- Estoy en tratamiento de rehabilitación particular
- Estoy con un psicologo particular.

Y lo peor de todo es que no puedo andar y soy una persona TOTALMENTE DEPENDIENTE.

Todo ha sido a raiz de mi estancia en la Residencia Domus Vi Ciudad de las Artes.

Muy buena apariencia al principio os recomiendo no dejéis embaucaros por las palabras porque en mi caso las consecuencias han sido horribles: soy totalmente dependiente, no puedo andar y, aunque estoy en tratamientos diversos no se si volveré a andar.

Huir. Repito: no os dejéis embaucar por las buenas palabras del principio. Horrible.

Muy.muy, muy agradecidos con el personal de "a pie", los que están en contacto día a día con los internos. Su grado de implicación nos resulta gratamente sorprendente. Mi familiar ha ido pasando por todas las etapas degenerativas hasta su fallecimiento y solo tengo palabras de agradecimiento. Gran profesionalidad, con un extra impagable de cariño.
Un pero, la excesiva rotación de los empleados, desconozco la política de contratación o gestión, pero parece que si se implican demasiado, o los cambian, o es que abusan de la temporalidad. Con todo, nunca olvidaremos sus sinceras muestras de cariño, dolor y comprensión.

Una muy buena residencia, donde los trabajadores trabajan día a día para que todos esten atendidos a la perfección. Despues de tres años, estoy muy contento con todo.

Tengo muy buenas referencias de esta residencia y por lo que me han contado no estoy de acuerdo con los comentarios negativos.tienen a personal muy cualificado y está bien en calidad/precio. Las plantas están separadas para l@s residentes en función de sus condiciones físicas y cognitivas. En otras residencias no se organizan de esta forma. La recomendaría para alojar a un ser querido que lo necesite.

Tengo un familiar desde hace un par de años y sólo puedo decir cosas buenas. Trato excelente y dedicación, buen equipo que cada día se esfuerza por hacer sentirse en su hogar a los residentes. Siempre que me ha surgido un problema se me ha atendido y solucionado con profesionalidad.

Totalmente recomendable.

ESTA RESIDENCIA VA DE MAL EN PEOR. ES UN CÁOS DE PRINCIPIO A FIN. LA ROPA DESAPARECE EN LAVANDERÍA A PESAR DE ESTAR MARCADA, PREVIO PAGO DE 90. - EUROS. LA COMIDA ES MUY FLOJA. EL PERSONAL QUE VISTE A LOS RESIDENTES CONFUNDE ROPA DE VESTIR CON PIJAMAS. ESTA TARDE MI PADRE ESTABA VESTIDO CON UNA CAMISA Y EL PANTALÓN DEL PIJAMA, TE QUEJAS Y LA SUPERVISORA TE DICE QUE NO ES PARA TANTO. DIRECCIÓN NOS COMENTÓ QUE LLAMÁRAMOS PARA CUALQUIER PROBLEMA, LLAMAS Y NUNCA ESTA DISPONIBLE O HA SALIDO. VARIAS VECES HE VISTO COMO LOS RESIDENTES TENÍAN LA MEDICACIÓN CONFUNDIDA. ME PARECE QUE UNA RESIDENCIA QUE SE PRESUPONE BUENA, Y CUESTA 2.300 EUROS. HABITACIÓN COMPARTIDA, LA INDIVIDUAL TODAVÍA ES MÁS CARA, NO SE PUEDE PERMITIR ESOS ERRORES. LO ÚNICO QUE LE SALVA SON LOS/LAS AUXILIARES Y EL PERSONAL DE RECEPCIÓN QUE SON LO MEJOR DE ESE CENTRO. UN 10 A ELLOS POR SU CARIÑO Y DEDICACIÓN Y UN SUSPENSO AL PERSONAL DIRECTIVO.

Me gusta mucho la atención y las instalaciones, además hay suficientes personas para atender a los abuelos, sinceramente es un bonito sitio hasta para uno que va de visita recurrente.

Tras casi ocho meses en este Centro, prácticamente la totalidad de las incidencias que nos estamos encontrando (hasta el punto de resultar agotador), son debidas a una manifiesta falta de personal y mala gestión por parte de Dirección.

Auxiliares que hacen lo mejor que pueden su trabajo, en estresantes jornadas, donde, a día de hoy, el número de residentes que han de atender puede ascender hasta 32 para únicamente 2 auxiliares. En mi caso personal (hablo exclusivamente de lo que conozco y vivimos a diario: actual Segunda Planta), me refiero a aquellos que tienen un gran nivel de dependencia, que por condiciones físicas o cognitivas requieren de más ayuda.

Las características del perfil de las personas mayores que ingresan en una Residencia se están viendo modificadas los últimos años hacia una mayor dependencia, con Alzheimer, demencia u otras importantes patologías. Por lo que el Centro debería adaptarse mejor a estos cambios, comenzando por incrementar el número de cuidadores. Así como el correspondiente aumento de personal sanitario, desbordado en muchos momentos.

Errores en el suministro de medicación; infecciones urinarias por insuficiente hidratación; falta de cambios posturales; vestir con ropa equivocada o guardada incorrectamente en los armarios (pese a estar todas las prendas debidamente etiquetadas) ; determinadas caídas en algunos pacientes; ciertos residentes que se van a otras plantas y que, posteriormente, detectada su ausencia, hay que ir a buscar, etc. Todos estos ejemplos y más, serían fácilmente evitables si existiese un mayor número de personal.

Que las enfermeras y auxiliares diariamente “saquen bien el trabajo” no es indicador de la existencia de un número adecuado, sino muestra de la deshumanización del Sector, donde lo que prima es el máximo beneficio económico por encima del bienestar de nuestros mayores.

Encomiable la labor de much@s de las/los auxiliares del Centro, porque pese a la “explotación” a la que se ven sometidos, realizan su trabajo con gran profesionalidad y cariño. Donde no faltan las sonrisas y muestras de afecto hacia los residentes.

Y si algo recomendaría a aquellos que busquen un Centro es que independientemente de informarse muy bien y visitar las instalaciones, pregunten a familiares de Residentes, que se animen a hacerlo. Porque posiblemente, en cuanto a determinados aspectos, de ellos obtendrán una mayor veracidad de las posibles deficiencias que puedan haber.

El trato del personal muy bueno, personas resolutivas y amables que solventan los problemas que surgen aunque este fuera de su alcance.

Las instalaciones y servicios correctas, conforme se encuentra el panorama de residencias y lo que nos ha costado buscar y sufrir los fallos de muchas, a dia de hoy, no cambiariamos a nuestro familiar, han pasado ya tres años y suficientes para saber que esta en buenas manos.

Las auxiliares son maravillosas, el centro es nuevo y moderno, pero la organización, q entiendo q es responsabilidad de la dirección, creo q no es buena. Un centro en el q la que el precio de la estancia supera los 2000 euros, no puede permitir q la ropa se pierda en menos de dos meses q lleve mi padre, q le pongan ropa de otra persona día si día no, q lleve 15 días con el aire acondicionado y lo solucionen poniendo dos ventiladores, y q el aseo personal de una persona gran dependiente cómo es mi padre, deje mucho q desear.estamos un poco decepcionados. En resumen, hay una gran falta de personal y las q hay no llegan más. Ellas son lo mejor del centro. Mi enhorabuena a las auxiliares, personal de recepción y a María. Dirección debería reflexionar sobre este tema.