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Bonito local en primera línea de playa. Buena carta de Gin tonics y servicio juvenil y poco profesional, pedimos 5 donde se indicaba en carta con que especias/fruta iba acompañado, nada más lejos de la realidad, te sirven ginebra premium puesto como un Beefeater. Nuestra sorpresa es que nos acercamos a la barra a preguntar y tenían todo tipo de especias y fruta, pero no lo habían puesto. Si pagas una ginebra cara, que menos que te la pongan como indican en su carta. Independientemente de la crítica, si quieres un local bonito en la playa, es una buena elección.
Lugar muy tranquilo con gente amable y respetuosa. Justo lo que queriamos, un sitio donde relajarnos, precios ajustados a todos los clientes, trabajadores rapidos y muy amables.
Las hamacas y tumbonas son gratuitas para clientes del Xiringuito. Sentido común: no tomes un café y uses la tumbona todo el día. Merece mucho la pena pasar el día aquí tomándote algo fresquito. El camarero viene a la propia tumbona y los precios me han parecido muy ajustados a la zona en la que estás: Una cocacola + 1 tinto de verano = 5€. Un platito de aceitunas = 2€ Botella grande de agua = 2'50€.
No tienen muchas opciones de comida, son latas y algo de picoteo. Para comer, trabajan con Restaurante Mario, a 100m.de ahí y muy recomendable.
El xiri está genial para relajarte en una hamaca a pocos metros del mar con una bebida fresquita Puntos en contra: No hay música ambiental en la arena No dejan entrar a perritos.entiendo que es normativa del ayuntamiento pero podrían pedirles que en la zona del xiri puedas estar con ellos por la noche.en otros chiringuitos de playa si dejan
Segunda vez que acudo y siguen igual. En la primera ocasión, mucho tiempo para tomar nota y servir, también para pagar. En la segunda ocasión, me he sentado 20minutos y sin ser atendido me he ido. En ambas ocasiones con 4-5 mesas ya servidas y el resto de mesas libres.
Hemos ido hoy lunes 12 julio y no nos han atendido en media hora. Nos fuimos decepcionados. Las camareras pasaban de largo, nos miraban y se iban. No lo recomiendo nada.
Lo tiene todo para triunfar pero se queda en un intento. Servicio lento en la zona de la playa. Hamacas copadas por gente que no consume y copas en vaso de plástico sin servir completamente a 9'50 €, es un atraco.
Un fabuloso local en la Platja de Bellreguard, único en su género por esta zona. La variedad de cervezas y cócteles es impresionante, el servicio se desvive por atenderte y su situación tanto en arena, como en el paseo marítimo como en el interior del local te permite elegir dependiendo del ambiente que te apetezca.
Pésimo servicio. Los camareros antipáticos o directamente te ignoran. Más de 40 minutos para servir 5 "cócteles" caros y de calidad más que cuestionable (granizado con un poco de alcohol, en un pequeño vaso de plástico). Prometen acompañarlos de unas golosinas que nunca llegan pese a los reiterados recordatorios. Por último, y lo más grave, dejan las bebidas sin supervisión en medio del paseo marítimo antes de llevarlas a las mesas. Nada recomendable.
Cafe Brasilia. Carta con precios especificados. Gran variedad de Cervezas, cockteles, cavas y champang. La decoración es de estilo Boho, tan de moda este año.
Para un nuevo bar que ponen en la playa con un nuevo concepto deben mejorar. Los precios son caros, los camareros no se conocen la carta y que utilicen un medidor para echarte determinados whiskies me parece reseñable negativamente. Pero si hay que decir que tienen amadas en la playa y te sirven en ellas, aunque no pidas la bebida en la barra y les digas que te la lleven a las hamacas porque, por lo menos en mi caso, no lo hicieron. Dentro del local tiene música pero en la playa no (cosas del ayuntamiento supongo)
Regular le daremos un 5 por que todavía no saben poner un buen gin tónic con la piel de limón unas semillas de pimienta y algo que no debería faltar las famosas gominolas, digo.