La Fábrica de Huellas

Un sitio muy apacible con trabajadores muy entregados. Los gatos están a sus anchas, unos duermen, otros son curiosos y se acercan a olerte, y van apareciendo y yéndose según les parece

Si eres amante de los animales, debes conocer esta cafetería. Hacen una gran labor. Me gustó muchísimo el ambiente, la educación y el respeto por los gatitos. Todo el mundo estaba hablando bajito, con lo cual se respetaba el descanso de los gatetes más dormilones. Hay dos zonas diferenciadas, la de espera, en la que puedes hacer uso de la cafetería y acudir con tu mascota, incluidos perros, y la zona de los gatitos. El acceso a la zona de los gatos está restringido. Debes reservar con antelación para poder acceder.
Sin duda, repetiremos.

El sitio genial, variedad de comida y genial la labor que hacen. Como recomendación no dejaría entrar hasta cierta edad o limitaría más el número de gente a una hora, porque los gatos se nota que se estresaban y se cansaban de la gente.

Una experiencia increíble, no tengo mas que palabras de agradecimiento. Hacen un trabajo increible con los gatos y se nota que lo hacen desde el amor y el respeto La atención de las chicas de 10 super amorosas y atentas.
Personalmente era un lugar que tenia visto hace un año y por fin me anime a venir y dios fue increíble. Logre conectar a otro nivel con el lugar, las chicas y especialmente con Sami!
Mi compañero de vida Pancho fallecio este año y cuando llegue solo me sente y la verdad no esperaba conectar con ningun gatete, deje mi chaqueta en la mesa y me di vuelta para ver una gatita colorada que estaba durmiendo en una de las camitas y cuando mire la mesa Sami estaba ahí. Ella solo se acosto ahí y no lo podia creer los ojos se me llenaron de lagrimas.al recordar a mi pancho. Hay gatitos para todos los gustos mas juguetones, mas tranquilos, mimosos o que solo les gusta mirar pero todos estan tan bien cuidados y hermosos.
Recomiendo esta experiencia al 100% y mas si tuviste un compañero/a como yo y fallecio.la alegria y la emocion todo no lo se aun estoy en shock!

Gracias Gracias Gracias! Voy a volver!

Estaba todo muy bueno y bajo una compañía e iniciativa muy buena. Pasamos muy buen rato allí.

El lugar muy limpio y la atención al cliente fantástica. Puedes estar con los gatitos y son muy cariñosos. Recomiendo ir allí al menos una vez. Nosotros fuimos una vez con el perro y otra para entrar con los gatos sin el perro. Volveremos seguro!

Fuimos un domingo por la tarde, casi a punto de cerrar, nos sirven avisando que tenemos media hora. Muy limpio, ambiente agradable y los gatos bien cuidados

Una pasada, la verdad es que se respira un ambiente súper tranquilo, los gatos están muy bien cuidados, mi hija fanática de gatos cuando tiene "mono" de gatos la llevamos, achucha a unos cuantos y ella súper feliz, además la cafetería tiene opciones veganas y saludables batidos y smooties naturales buenísimos el personal es súper agradable

I and my kid recently visited Fabrica de Huellas center with homeless cats and had an amazing experience! The concept of this place is truly unique: you get to spend time with adorable cats that are looking for a new home, while also enjoying a delicious meal in a separate room. The cats are super friendly and love to be petted, making the experience even more enjoyable.

The desserts were absolutely delicious, and the atmosphere was super nice. The staff was friendly and welcoming, and made sure we had everything we needed. I was impressed by how clean and well-maintained the space was, despite the presence of so many cats.

Overall, I highly recommend Fabrica de Huellas to anyone looking for a fun and unique dining experience, or simply looking to spend some time with adorable cats. It's a great way to support a good cause and enjoy some tasty food at the same time!

Es un sitio pequeño pero acogedor con zona para gatos en el interior donde puedes pasar rato jugando con ellos y acariciándolos, además de tener la posibilidad de adoptarlos. En la entrada tiene una zona dog friendly donde pueden ir gente con sus perros. La decoración es una cucada y la repostería y bebida estaban ricas.

Un sitio estupendo para amantes de los animales, son bienvenidos los perros y hay una sección de gatos donde se puede interactuar con ellos, se dejan tocar.

Un sitio precioso, todos los gatos son maravillosos y la comida está riquísima. Además la atención del staff es genial. 100% recomendado

Si te gustan los gatos, este es tu lugar. Sitio encantador en el que disfrutas de la compañía gatuna y además puedes tomar algo rico. Se preocupan un montón por sus amigos gatunos.

Really beautifully designed cat cafe. Their selection of food and drinks is great and the cats are friendly

Café original donde puedes tomar algo en la sala donde están dando vueltas los gatitos. Hay que reservar con tiempo las plazas, eso sí, porque hay (justamente) aforo limitado para no agobiar a los animales.
No pongo 5 estrellas porque me encantan los gatos y esta idea para cuidar de ellos, pero, me ha hecho dudar de sí a los gatos realmente les gustes estar constantemente rodeados de gente diferente que a veces intenta jugar con ellos aunque no quieran.
Es una experiencia de toda forma y, tomar algo, es una ayuda para que la cafetería pueda cuidar de ellos.

Hoy hemos ido mi pareja y yo y nos hemos ido un poco disgustados.
Había muchos niños junto a sus padres en la zona de los gatos, donde los niños no paraban de ir detrás de ellos, agobiarles para que jugasen, no les dejaban dormir tranquilos, los acariciaban de golpe. Me ha dado mucha pena, ya que varios de ellos no querían que les tocasen ni con la mano ni con plumas, sólo querían descansar, no querían saber nada de las personas y los niños venga a tocarles con los juguetes la cabeza y la boca. Pienso que debería de haber un mínimo de edad y respetar totalmente su espacio.
Después, los Smoothis que nos hemos tomado, eran ya preparados o congelados. No sabían para nada a frutas. No volveremos ️.

Me encanta el sitio pero hoy mis amigos y yo nos hemos ido con un muy mal sabor de boca, nos han atendido súper tarde al igual que al preparar todo, hemos tenido solo media hora para tomarnos lo que habíamos pedido, encima la cajera es una antipática y encima lenta, le hemos preguntado su nombre y no nos lo a querido decir (es una pelinegra con pelo corto y rizado, con rasgos latinos) me estoy pensando si volver a ir o no.

¡Una experiencia que no repetiría, ni recomiendo!
En primer lugar nada más llegar al establecimiento tardan 20 minutos en atendernos, habiendo llegado con 10 minutos de antelación a la reserva. Después cuando nos atienden no miran que verdaderamente tengas una reserva hecha y, también, vimos cómo dejaban entrar antes a un grupo de 6 personas las cuales no tenían ningún tipo de reserva, antes que dejarnos pasar a mi y a mi compañera, que si la teníamos.
Más tarde, después de que nos llevaran a nuestra mesa tardaron casi 30 minutos en tomarnos nota, lo cual me parece indignante, ya que la encargada de ello estaba, simplemente, dando vueltas por el local sin hacer nada.
En segundo lugar, los gatos se les veía bastante agobiados por la gente, y sobre todo por los niños pequeños. Personalmente, creo que no deberían permitir la entrada a niños, ya que suelen no saber cómo tratar con animales, y más con gatos, lo cuales no son sociales por naturaleza.
También cabe aclarar que muchos de los gatos ahí presentes no estaban cómodos con el ambiente que había en la zona establecida para ellos estar con los humanos, como con las reservadas para ellos solos.
Aquí dejo una foto en la cual se aprecia como este gato intentaba escapar de allí, pues su sitio está en la calle como muchos otros. Porque aunque muchos no lo admitáis, no todos los gatos buscan un hogar, ni una familia, ya que ellos solos en la calle están mucho mejor que encerrados como una exposición de un museo.
Espero que esta reseña haga cambiar la organización de este local y prohiban la entrada a los niños pequeños.
Un saludo.

Un sitio realmente bonito en el cual puedes tomarte algo rodeado de tu mejor amigo, y con gatitos en adopción, puedes ver realmente cómo es su personalidad. Lo único el consumo mínimo por persona y la atención un pelín lenta.

El sitio muy limpio y el personal muy agradable. Puedes estar tomando un café mientras disfrutas de la compañía de los felinos que estan limpios, sanos y son muy amigables.
Si vienes con crios se lo pasan estupendamente y difrutan de los animales.

Qué gran labor que hacen! Y siempre con una sonrisa en la cara, me encantó la experiencia y además la comida que ofrecen está riquísima.
Una buena manera de que si estás interesado@ en adoptar, puedas ver con qué gatito conectas mejor.

Si buscas probar cosas nuevas y visitar sitios con encanto este es tu lugar, muy bien acompañado por los amigos gatunos y por la excelente amabilidad del personal. También destacar sus batidos y lo rica que hacen la comida, ambiente único y recomendadísimo.

Lugar muy agradable rodeada de gatitos (puedes jugar con ellos) mientras tomas un café o si te apetece puedes llevar a tu perro ya que hay una zona para ello. Las cantidades de los zumos está genial, las chicas son muy majas.

Ambiente acogedor y muy bonito. Como es costumbre en este tipo de sitios, la entrada es gratis con la condición de hacer una consumición mínima a la carta. Por eso, los precios que descontextualizados quizás podrían parecer un poco altos (botella de agua de 1,5L a 3€, un donut a 1.50€) a mi se me hacen, de hecho, muy barato para lo que incluye el servicio. También tienen smoothies cafés. Me ha hecho muy feliz venir, los gatitos estaban durmiendo la siesta muy tranquilos:)

Cafetería ubicada en Valencia cerca del Barrio del Carmen (casco antiguo). Puedes tomar algo y jugar con gatos que la protectora de animales de la ciudad ofrece en adopción. Zona para perros. Aparcar cerca es algo complicado pero no imposible.
Trato muy amable y buen servicio y calidad de los productos.

Un lugar mágico, cuánta energía más bonita, hemos ido con mi hija de 9 años que es defensora y amante de los animales, sobre todo de los gatos, es una labor muy bonita la que hacen, se nota en ellos el cuidado y amor que les brindan, una iniciativa digna de admiración, volveremos sin duda!

Indispensable para los amantes de los animales. Una buena forma de ir a tomar algo y contribuir a una buena causa. Cada gato tiene su personalidad, están muy bien cuidados y tienes zonas para descansar de las personas.

Atención personalizada y personal motivado y feliz con su labor.

La finalidad es que estos gatos rescatados sean adoptados, por lo tanto, ven a conocerlos y si te enamoras de alguno hazlo miembro de tu familia.

Fui a la casa de los gatos por que nunca había ido, el personal muy atento y amable y los michis todos un amor y cada uno con su personalidad.
Una de las cosas que más me gustó del sitio es que por el ambiente (sobretodo la música) es muy fácil desconectar y relajarte.
Sin duda volveré a ir.

He visitado por primera vez la casa de los gatos de la Fábrica de Huellas, un lugar tranquilo y acogedor donde tomar algo en compañía de los gatitos en adopción. Me ha encantado conocer a los peludos y la merienda me ha parecido deliciosa.

He ido a bastantes "cafés de gatos", pero este es el que más lleno ha estado con diferencia. Unas 15 personas en una habitación no especialmente grande. Obviamente ningún gato se va a acercar (a menos que sea a por comida) por la saturación (por lo que veo en otras horas habrá menos gente)
La labor que hacen es genial y los gatos se ven bien cuidados pero si uno de los objetivos de este lugar es favorecer la adopción de los que estan dentro.con tanta gente sólo estan apáticos. Uno no se quiere acercar porque se nota que ellos no quieren.
Las grandes mesas de madera no tienen especial encanto, quizá le falte más equipamiento para gatos y menos para humanos.
No pongo menos nota por no perjudicar su puntuación, pero ojalá cambien el aforo: (

No dudo de la buena labor del sitio pero ha sido una decepción. Según las reseñas y su información, esperaba un sitio tranquilo y respetuoso con los felinos pero en mi visita nos encontramos muchos niños y dos adultas, que parecían de la casa, agobiando a los gatos sin tenerles en cuenta en absoluto. Griterío y estrés.

Visiting from America and I needed some fur baby love and this place fit the bill. I was so happy to be told about it. The staff was friendly and helpful even tho my Spanish is poor. The food was delicious and no expensive at all. I really enjoyed all the cats and wish I could take them home with me.

Al principio te encuentras con un servicio al cliente muy agradable, el personal es muy educado y eficiente, nos han tomado nota enseguida. Además la zona de los gatos está muy bien asegurada para que los gatos disfruten del ambiente tranquilo, en ningún momento los gatos se han podido a llegar sentir incómodos ni amenazados, el personal siempre estará para cuidarlos y mirarlos.
Los precios son muy accesibles, aunque vivas lejos merece la pena venir, es una experiencia.

Ayer fuiy no me parece un lugar adecuado para los gastos ya que estaban muy estresados y agobiados esos pobres gatos no ven la luz del sol y están todo el día y la noche allí encerrados parece un circo donde la gente va ver sin importar las condiciones

Kind of underwhelming. There is a small space with cats that you can interact with and another separate small space where you can get snacks and drinks. You can bring your pet into the cafe.
I honestly think that this concept would work better if the cats are in the same space as the cafe itself, not separated so you can enjoy a coffee and sweets while interacting with the cats at the same time.
The space also doesn’t feel very cosy, i.e. Soft couches and pillows would make it a lot more inviting than hard benches.
That being said, I have been to cat cafes in Japan so my standard is kind of up there, but I think they could use those as an example to improve.