La Garriga

El entorno es precioso y las cabañas son muy bonitas y limpias. La única pega es que están muy justas de equipamiento: hay pocos platos y escasos cubiertos y vasos, falta una tostadora y un microondas para el desayuno. Por lo demás nos ha gustado mucho!

Lo maravilloso de este lugar es que su entorno natural es privilegiado
Y si sumamos la atención de Alicia , lo hermoso de las cabañas y el
delicioso clima , tenemos un lugar encantador para el disfrute de grandes y chicos ! Es toda una extraordinaria experiencia .

La Garriga ofrece una experiencia única e inolvidable, sumergiéndote en la tranquilidad y belleza de La Vall de Gallinera. Las cabañas son acogedoras y confortables y permiten una conexión profunda con la naturaleza y la vida de los encantadores pueblos de la Marina Alta.

Fuimos 8 personas buscando escapar del bullicio, hacer convivencia y vivir a un ritmo más lento y consciente. La cabaña está perfectamente equipada, lo que nos permitió una estancia cómoda y sin preocupaciones.

Hemos ido un grupo de 18 adultos con 16 niños, nos ha resultado ideal. Las casas tienen lo necesario para las necesidades básicas, (ventaja, ya que con niños huimos de casas llenas de jarrones y cuadros). Fin de semana estupendo. Entorno rural con todas las letras. Volveremos sin duda.

Entorno maravilloso. La cabaña preciosa, muy bien cuidada y con todo lo necesario para pasar unos días en plena naturaleza con la familia. El recinto está súper cuidado y acondicionado. La atención magnífica. Volveremos sin duda.

Un lugar en plena naturaleza donde conectar con ella y tu peludo, los anfitriones de 10! La cabaña fresquita y super equipada, la comida que nos han servido era de pueblo y super buena! No me iria nunca de aqui!

Un oasis natural en mitad de la montaña

Acabo de pasar un fin de semana maravilloso en La Garrida y no puedo dejar de compartir mi experiencia. Este sitio es un verdadero paraíso natural en medio de la montaña, donde la naturaleza se mezcla con la tranquilidad y la diversión.

Las cabañas están perfectamente equipadas y son refrescantes incluso en los días calurosos. Además, La Garrida es "pet friendly" y permite que las mascotas nos acompañen en nuestra estadía. Disfrutando de todas las actividades al aire libre.

Hicimos varias excursiónes con Nacho de Lupus a Kan, un adiestrador canino muy experimentado. Fue una experiencia fantástica y educativa, disfrutamos de una caminata guiada por la montaña junto a nuestros peludos compañeros. Es genial poder contar con profesionales que nos brindan estas oportunidades en La Garrida.

La variedad de actividades que se pueden hacer es impresionante. Varias rutas de senderismo y explorar la belleza natural que rodea a La Garrida.

No puedo dejar de mencionar a la dueña, Alicia, quien es una persona encantadora. Siempre estuvo pendiente de que estuviéramos cómodos y se preocupó por cada detalle de nuestra estadía. Incluso nos preparó un asado de lujo, que fue simplemente delicioso. ¡Fue un verdadero festín para los sentidos!

Recomiendo encarecidamente La Garrida a todos aquellos que busquen un escape de la vida urbana y quieran sumergirse en la naturaleza. Este lugar es mágico, lleno de paz y serenidad. No puedo esperar para volver y disfrutar nuevamente de todo lo que La Garrida tiene para ofrecer.

¡Gracias a Alicia, Nacho de Lupus a Kan y a todo el equipo de La Garrida por hacer de mi fin de semana una experiencia inolvidable!

Cabaña con dormitorios, cocina, aseo, porche y barbacoa, por un precio muy bueno durante todo el año. Entorno maravilloso, pueblos con encanto. Nos gustó mucho, la pena es que la cocina era muy pequeñita. Tiene una balsita para refrescarse en verano.

Lugar para disfrutar de una buena barbacoa, paseos por los alrededores, y, evadirte de la ciudad. La cabaña tiene todo lo básico en cuestión de cocina, baño y dormitorios. En Otoño, Invierno y Primavera se está muy bien, en Verano, lo desconozco, pero al no tener Aire climatizado, y, la cantidad de insectos puede hacer que la estancia sea más dura. En general, un buen sitio para disfrutar de la naturaleza.

Entorno fantástico. Las instalaciones podrían mejorar bastante. Las casas en general son bonitas, pero el equipamiento es mínimo. Cocina y frigorífico pequeños.
Nosotros estuvimos en una de 8 personas, pero las habitaciones son pequeñas, equipadas con 2 literas cada una y para de contar. Ni una mesita ni un armario.
El salón no es muy amplio, además no tiene ningún tipo de comodidades. Dos mesas, cuatro sillas y dos asientos fijos en forma de L. Si quieres poner las dos mesas en línea no pueden sentarse las 8 personas.
No ha ni tv, ni chimenea.
El aseo es amplio.
La limpieza es justita.
Los exteriores cuentan con una pérgola de madera y una mesa grande y a unos metros una buena barbacoa. No se dispone de leña, hay que comprarla o llevar carbón para la barbacoa.
En resumen se trata de un buen sitio, con unas buenas instalaciones y en un entorno muy bonito, pero poco cuidado y poco confortable. Vreo que para verano es poco recomendable, ya que los insectos, moscas, avispas y demás hacen que la estancia sea complicada.

En verano, lo único disfrutable es el paisaje y los cortos lapsos que encienden la cascada, mientras está apagada el calor abrasador y las avispas no dejan mucho para disfrutar y en las cabañas es imposible permanecer, no tienen aire acondicionado, calculo que en invierno han de ser una opción placentera para los amantes de lo rústico y aislado, no olvido que las hermosas barbacoas permanecen cerradas con candado en verano