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Tenía un grato recuerdo de la última vez que estuve aquí, fue en Febrero y me gustaron las bravas y los nachos. Pero se ve que han cambiado de gerencia, porqué las bravas eran bastante mediocres. Me sabe fatal escribir ésto porqué fueron muy amables y simpáticos pero es que tardaron media hora en sacarme la pizza y eran casi las 12 de la noche y con el local casi vacío. Una pizza horriblemente mala y cara, 12€ por una masa blanca, blanda, típica pizza congelada hecha en microondas, el queso no tenía ningún sabor y supuestamente era de verduras y solo llevaba pimientos picados encima, me parece una falta de respeto y un insulto al cliente servir eso como una pizza y encima cobrar 12€ por ella, indignante la verdad. Lo siento pero NO volveré ni de coña!
Un bar muy agradable para comer, el servicio es rápido y muy amable, los platos generosos y muy buenos, merece la pena ir. Hacen platos especiales por encargo: cochinillo, gazpacho manchego. Volveré a ir seguro.
De lo mejor de Benimaclet. Las tapas y raciones, ricas, abundantes y buen de precio. La atención del personal, realmente profesional y cercana. Incluso en Fallas, perfecto para acudir en grupo. Ojo. Importante reservar. No cuesta mas que un minuto de llamada y te aseguras disfrutar. Totalmente recomendable.
Fuimos bastante tarde a comer y pedimos nachos pero se acababan de terminar, aún así la chica vio mi cara de decepción y fue a la cocina a preguntar y volvió sonriendo diciendo que me los iban a preparar. La verdad fue todo un detalle. La pizza estaba espectacular y las bravas muy ricas también. Volveremos
He ido dos veces a este sitio, Antes de que cambiará de dueño. La primera con mi familia, y juramos que no volveríamos jamás, platos devueltos (comida en pésimas condiciones, no toda pero casi toda), mal trato. En fin. Pero ayer mis amigos estaban allí porque no había mesa en otro sitio y no tuve más remedio que ir, aparte de que los precios son desorbitamos el trato de Una de las camareras lamentable, si no te gusta tu trabajo no trabajes ahí y menos cara al público. Yo no recomiendo este sitio, hay mil sitios en Benimaclet mejores de precio y donde la gente si te trata bien. Una lástima porque antes de que cambiara de dueño el sitio era un 10
Horrible experiència. Tardaron casi 2 horas en sacarnos la cena, la carta muy cara para lo que es. El jefe habla de muy malas formas a la camarera y la cocinera.
En la terraza parecía que se estaba mejor. Dentro un olor muy fuerte que se queda en la ropa y en el pelo. Hemos pedido infusiones, nos han traído, pidiendo lo mismo, clases diferentes de infusión con muy poca agua, como en taza de cortado. El precio era elevado para lo que nos han servido. No ha sido mala experiencia pero nos ha parecido mejorable.
Otras personas sí estaban disfrutando de tapas. Quizás sea mejor opción ir a comer que a tomar algo.
El típico bar que se aprovecha de la buena localizacion de su terraza para ofrecer un servicio y comida muy mediocres y a precios más bien altos. Prefiero otros muchos sitios en Benimaclet
Muy flojas las tapas. Pedimos bravas, que estaban muy picantes, con tanta salsa que no apreciabas el cocinado de la patata; ajoarriero, lo tuvimos que devolver porque estaba pasado, no se podía comer, pensamos que nos sacarían algo a cambio porque seguramente lo tenían hecho de a saber cuándo pero no. Los machos pasables y la ensalada de burrata y jamón de pato es bastante insípida. Además te cobran el servicio de pan. Para tomar una cerveza este bien, porque no es caro, pero la carta deja mucho quedñ desear
La atención fue muy buena. Comimos cuatro personas de tapeo y cervezas tocamos a 20€/persona. La ensaladilla y las tellinas nos encantaron, también pedimos sepia, patatas bravas y tartar de atún con un toque picante. Los postres muy ricos. Nos ofrecieron una bebida que están elaborando para introducirla en la carta.
No puedo opinar sobre comida ya q eran las 11 y solo pasamos a tomar un bermut y unas cervezas. Pedimos q pusieran unas aceitunas y nos dijeron q no había y nos pusieron unas patatas de bolsa. Despues de nosotros pasaron un par de parejas y nos quedamos sorprendidos al ver q les ponían un bol con aceitunas.
Absolutamente pésimo. Comida a precio de oro mal cocinada. Mala organización y personal poco profesional. Fuimos el sábado con reserva y estaba cerrado. Todo la terraza llena y el local con la persiana bajada a las 20 de la tarde.
Sitio donde las raciones son muy escasas en comparación con el precio. Pedimos pulpo y vino frío con un montón de puré de boniato y realmente 4 trozos de pulpo. La siguiente ración de jamón ibérico (cosa que dudo que fuera ibérico) tenía dos pelos y el jefe no me creyó e incluso me dijo que se los enseñara, cuando una compañera me había visto quitarlos. Dada nuestra disconformidad nos fuimos sin pagar. Cabe destacar la función del camarero que estuvo muy amable y evidentemente no tiene culpa puesto que él hace su trabajo. En definitiva un lugar no recomendable si de verdad quieres cenar.
Las sillas de la terraza son muy incómodas pero la verdad es que nos vendieron unas hamburguesas de animales exóticos que acabaron siendo muy simples y bastante malas. Nada recomendable
Pensaba que era el mismo restaurante del que me quedó muy buen recuerdo pero al llegar allí, lo único que conserva es el nombre.
Servicio lento y de trato seco, muy poca variedad en la carta y cuando consigues decidirte la mitad de cosas te indican que ya no les queda (mesa reservada en sábado a las 22, vamos muy poco aprovisionamiento) Algunos platos estaban buenos, otros no tanto. Precio caro para lo que se ofrece y visto el resultado. Lástima que ya no sea "La Plaza" que era, para mi uno de los mejores en Benimaclet, ahora ya es un lugar para no volver dadas las ofertas restantes de la zona.
La sepia muy dura y en el entrecot vinieron 2 pelos, se lo dijimos y nos contestó que qué le iba a hacer. Además preguntamos para cena de los niños y nos dijeron que hamburguesas y el precio de cada hamburguesa de niño fueron 10 €. Un sitio para no volver.
De restaurante tiene poco. La comida, para el precio que tenia, deja bastante que desear, nada fuera de lo común. No tardaron nada y trato normal. Para tomarse algo está bien pero para cenar hay ofertas mucho mejores en el barrio.