Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario. Al utilizar nuestro sitio web, usted acepta todas las cookies de acuerdo con nuestra Política de cookies.Aprende másOK
Porque no se puede poner menos, trato pésimo y producto peor aún cobrado a precio excesivo, además se percibe la poca limpieza. Para no volver en la vida.
El menú no está mal, no hay servicio de mesas pero a la tercera ronda un vaquero entrado en años te grita al oido, creando una mezcla de ambrosía y paracaidismo sinuoso, la vida sigue la zona sigue, disfrutad puede que esta consumición sea la última o la primera.