Masia Villalonga

Creo que no hay palabras para describir lo maravilloso que es alojarse en Masia Villalonga, desde el momento que empiezas a entrar por su cancela de entrada observas la belleza de su entorno y de toda la masía, el Valle, la naturaleza, los animales etc y tal como conoces a Tomás te das cuenta de que has acertado, tanto Tomás cómo sus trabajadores merecen un 10 por su atención, por su educación, por su preocupación diaria para que la estancia sea de lo mejor. Las casas son preciosas, la comodidad de los baños en las habitaciones, el aire acondicionado, ventiladores, en alguna hasta luces led, en unas casas de piedra y vigas de madera que no hacen más que hacerte sentir en un lugar entrañable, limpio y bonito. Viajamos un grupo de adultos y niños de diferentes edades y creo que tanto los adultos como los niños hemos jugado a todo, porque hay diversión para cada una de las personas, hemos estado una semana y nos han faltado días para disfrutar de todo, esa ruta de senderismo, la tirolina, el juego del aro, billar, futbolín y un largo etc y sin contar el rocódromo en el que Tomás es fantástico y los niños se lo pasaron genial o ese cine de verano, pero no cualquier cine de verano, un cine auténtico a la luz de las estrellas de ese cielo maravilloso que tiene la Masía. Si hablamos de la piscina es genial, estar tumbado en la hamaca y ver las ardillas por los árboles, sólo se oye los animales y el crujir de las hojas de los árboles cuando corre la brisa, el baño y ducha con agua caliente en zona de duchas y así podría estar escribiendo 2 días, porque no hay nada negativo que decir, todo ha sido perfecto gracias a Tomás y sus trabajadores que son maravillosos, discretos y amables. Volveremos sin duda y esperemos que pronto, es un lugar para ir de vez en cuando y disfrutar y relajate a la vez. Mil gracias a todos los que formáis Masía no lo podéis hacer mejor. Gracias de parte de todos los que estuvimos allí desde la más pequeña hasta el abuelo Miguel, que creo que ha vuelto a Barcelona con unos años menos. Sólo podemos decir gracias

Acogedora y espaciosa Masía clásica del interior de Castellón, que tiene espacio para unas 15 personas, rodeada de un enorme terreno privado vallado, de más de 100 Ha.

El interior y exterior de la Masía está en perfecto estado (totalmente reformado y modernizado, pero conservando el estilo rural), y con todas las comodidades necesarias para pasar unos agradables días en familia. Las habitaciones son tipo hotel rural.

En el exterior te encontrarás con el terreno boscoso mediterráneo típico del interior de Castellón, que podrás explorar por sus caminos y sendas, y descubrir algunos parajes realmente agradables.
También dispone de zonas deportivas, piscina, parque para perros, terraza con barbacoa, etc.

Un lugar especialmente único, que te ofrece un espacio bastante diverso para conocer, descansar, disfrutar y oxigenar la monotonía de la vida.

INMEJORABLE
Estuvimos este fin de semana y además de que las dos casas están en un estado perfecto y conservadas con todas las comodidades necesarias, el entorno te da un montón de posibilidades de juego y disfrute. Tomás muy atento y dispuesto a hacer la estancia más agradable si cabe. Sin duda, volveremos

No quería hacer reseña por egoismo. Pq si se conoce mas me costará tener hueco para nosotros. Pero lo justo es lo justo.
Este alojamiento es un sueño hecho realidad.
Habitaciones en suit, osea baño propio. Como un hotel. Limpio limpisimo. Comedor amplio para grupo grande. Cómodo y decorado con gusto. Exterior con mil detalles, juegos para niños y mayores. Parque completisimo y pista lisa para patines y patinetes. Entorno maravilloso, vacas por todos lados. Espacio vallado. El anfitrión cuida mucho los detalles, es muy atento y te ayuda en todo lo que necesites. No quiero desvelar mas pero diré que esta casa rural esta llena de sorpresas.

Queremos dar las gracias públicamente a Tomás por lo bien que nos ha tratado y lo bien acondicionada que está la Masia para disfrutar en familia y amigos haciendo juegos, fuera y dentro de la casa, así como las instalaciones del horno a leña y paellero para poder comer.
Muchas gracias!

Increíble la estancia! La limpieza, la comodidad de sus camas, lo equipada que viene.etc.

El dueño super amable y atento a cualquier cosa.nos han quedado cosas pendientes por ver.tiene un enorme terreno.nosotros íbamos sin niños pero tiene todo lo necesario para familias con niños etc.más que recomendable!

********EDITO DE NUEVO LA RESEÑA******* septiembre 2020
Hemos vuelto este año y el complejo (creo que es la cuarta vez) cada vez tienen mejores y más instalaciones y se nota el interés de los responsables en conseguir que la estancia de cualquier persona sea una experiencia totalmente positiva.
Toman nota de cuaqlquier sugerencia y si lo ven razonable y justificado no dudan en ir implientando cuantas mejoras sean necesarias, año tras año. En resumen, un lugar para ir siempre que se pueda a desconectar con los amigos y o la familia.
Y mi enhorabuena personal a Tomás y Mauri por su buen hacer.
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Buenas instalaciones. Buen emplazamiento para disfrutar de naturaleza y tranquilidad.
Fallan pequeños detalles en las casas y exteriores aunque van innovando y corrigiendo cosas año tras año. La intimidad es bastante pero no total. Te puede hacer más o menos gracia dependiendo de lo que busques. La familia trabaja por la finca y se suele coincidir con ellos y con el guardes que vive allí mismo. Por cierto se llama Mauri y es estupendo os ayudará en lo que necesitéis.
La persona que gestiona la parte de reservas de alojamiento y tal se llama Tomás. Estoy seguro que su intención siempre es buena pero se puede apreciar que tiene otras ocupaciones y o intereses que pueden influir en la atención, implicación y sensación final de la estancia de forma algo negativa pero es todo muy correcto en general.
Ideal para ir con niños y amigos.

Hay cosillas que creo que irán corrigiendo con el tiempo como:

La nevera de la casa pequeña es del mismo tamaño que la de la casa grande. En una caben 5 personas el en la otra 11. No tiene mucho sentido. Además son pequeñas de las que enfrían poco cuando las llenas demasiado.

Las mosquiteras están bien aunque en muchas cabe por las juntas hasta algo del tamaño de un pájaro así que ni te cuento los mosquitos. En verano hace falta tenerlas abiertas para refrescar las estancias y te pueden poner fino.

El espacio de almacenaje es algo escaso. Faltan estanterías o armarios donde poder guardar las cosas que no necesita frío trastos varios que llevamos siempre que salimos de vacaciones.

En la zona barbacoa se echa en falta alguna nevera tipo arcón o botellero de bar para poder aliviar la nevera interior de las casas y poder tener las bebidas y el hielo que es lo que más ocupa. Aunque hay una nevera grande isotérmica de corcho. Tienes que estar comprado mucho hielo casi a diario si quieres tener la bebida bien fría.

Por otra parte tiene muchos aspectos positivos y seguro que en la balanza estos hacen que no repares en los negativos pero esta bien mencionarlos sobre todo si sirve para mejorar.

*******EDITADO 30/05/19******
Realizo este nuevo comentario ya que es justo reconocer la implicación del propietario y el valor que otorga que hay tenido en cuenta los comentarios de los clientes que han pasado por su alojamiento.
Prácticamente han corregido cada uno de los pequeños detalles que comenté en mi anterior opinión y siguen trabajando año a año para mejorar más si cabe.
Por lo que ha dia de hoy merece sin duda una mejor puntuación

Fin de semana espectacular! La casa es preciosa, con todo lujo de detalles. Cada habitación tiene su baño independiente. Además está muy limpio y aseado. La piscina es maravillosa con tumbonas muy cómodas.
Un 10 a todo! El entorno es increible y los niños se lo pasaron en grande, pero nosotros también. Ademas el anfitrión, Tomás es un cielo de persona y estuvo muy atento en todo momento. Gracias por todo! Repetiremos en Septiembre ️ Ha sido un gran descubrimiento está Masia.
Recomendable

Hemos pasado unos días increíbles, la Masía es muy bonita y amplia, el entorno fabuloso y la piscina grande y muy limpia. Eramos 15 entre adultos y niños y lo hemos pasado genial. Tomás siempre ha estado pendiente de si necesitábamos algo o de hacer con nosotros actividades como tirolina, rocodromo. Sin duda volveremos

Habíamos ido dos veces, y mis hijos (11años) se empeñaron en volver por tercera vez.
Hemos pasado 5 dias estupendos tanto es así que no han querido salir de allí, ni canoas que hay un pantano cerca y una empresa que ofrece varias actividades.
Taller de helados al estilo de hace años, buenísimos, la piscina para nosotros solos, Coco que es un perro de aguas super noble y bueno, excursiones con bicis y walkies, tienen hasta un pequeño rocódromo y tirolina.
Capitulo a parte las comidas a nosotros nos encanta la carne a la brasa pero añade el horno de leña en el que hemos hecho pizzas, patatas, verduras varias, pan casero, y una paellita. En fin comer y relajarse y este año había WiFi en toda el entorno hasta en la piscina.

Es un sitio ideal para ir con niños y con amigos. Además el trato es muy bueno.
Para repetir.

No voy a hablar propiamente de la masía ya que lo único que conozco son las partidas de airsoft que se realizan en su periferia.
Es un terreno boscoso con construcciones adecuadas para realizar partidas de airsoft ya sea tipo búnker, fortín,
Se realizan partidas de bastante gente por lo que suelen ser muy divertidas y el terreno da mucho juego para poder realizar infinidad de Misiones.
En el ámbito de airsoft se le conoce como BUNKERHILL.