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Es un bar de barrio muy aseado y muy bien atendido. El local está muy limpio. Los baños muy limpios también. El dueño es muy amable y correcto, da muy buen servicio siempre dispuesto a que uno se vaya contento y es muy profesional. Aquí el almuerzo se paga cada cosa por separado. Me explico, medio bocadillo: 2,5€, bocadillo entero 4,5€, y luego la bebida con el arreglo y el café que te pidas. Por ejemplo, medio con agua, arreglo y café con hielo fueron 5,5€. Siempre hay gente dentro, de todo tipo de edades, sean jóvenes, mediana edad o mayores del pueblo. Y ves que todo el mundo se conoce, se saluda y se trata. Así que sabes que aquí no fallas, porque es el bar de pueblo donde va todo el mundo. Los precios los veo muy correctos. Si buscas un almuerzo normal sin complicaciones, es tu sitio.
Depende del humor con que pilles al dueño, tendrás una magnífica y personalizada atención o un ninguneo que roce la falta de respeto. Precios medianamente coherentes y buena zona para ir de paso a otros sitios donde tomar copas.
Buen bar porque es amplio, bien climatizado y tiene precios razonables. El dueño es un hombre muy majo, pero bastante estresado cuando hay gente. La mejor hora para ir es sobre las 7pm y degustar de una buena cerveza fría y así que no exista ese estrés tan cargado en el ambiente que da hasta yuyu.