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Puerto de la ciudad de Peñíscola. Turístico, muy bonito y cuidado. Digno de ver. Comercios de restauración, hoteles y ocio cercanos a el. Diferentes monumentos se encuentran en su paseo.
Lugar de obligada visita para conocer la vida de los pescadores y con varias opciones interesantes para comer o cenar con vistas al mar. Hay una pequeña feria para los niños.
Gran ambiente, locales, personas, servicio, cenas, música, bailes, dj, mikonos terraza expectacular, dj en directo, hay que venir a visitarlo, te dejan estar con tus hijos mientras disfrutas de una copa o un mojito en su terraza, ambientada para las ocasiones, un lugar de visita muy recomendable
Al igual que la Playa Sur, nos pareció que estaba poco cuidado. Lo bueno es que el paseo por los alrededores está muy bien y que el casco viejo se encuentra justo al lado.
Desde el puerto hay viajes en barco al rededor de casco viejo de Peniscola por 10€, 7€ para los discapacitados. El viaje dura 30 minutos y merece la pena. También hay otros barcos que hacen otros recorridos, más caros y de más duración.
Hemos ido al restaurante del puerto. Una tomadura de pelo. 78 euros por 6 gambas rojas. Ocho mini navajas y unos diez aros de calamar. Sin pan. Y de bebida tres copas de vino. Vosotros mismos. (Las gambas estaban frías).
IDEAL PARA PASEAR Y CONOCER LAS COSTUMBRES DE LOS TRABAJADORES DE LA MAR. TAMBIEN TIENES EXCELENTES VISTAS DE LA CIUDADELA AMURALLADA. LAS FOTOS SON DEL AÑO 2016.
Qué bonito es Peñíscola, tanto en verano como en invierno (especialmente en un día soleado). Entrar hacia el centro desde el puerto es una gozada. En el muelle del puerto se pueden contratar tours preciosos en barco, recuerdo haberlos hecho de pequeña (los llamaban golondrinas). Recorren el contorno de Peñíscola y se acercan a las cuevas/rocas desde donde dicen que escapó el Papa Luna. El puerto es sencillo, pero muy bonito. La ventaja de ir en invierno es que no hay aglomeraciones y te puedes hacer fotos tranquila. Recomiendo visitarlo.