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El restaurante se encuentra en el entorno del Puerto de Catarroja, que es muy bonito. Por dentro es como un restaurante/bar de toda la vida. Hay que reservar. Te cantan la carta, de manera que no puedes ver precios. Pedimos para comer un domingo 5 personas: 3 entrantes, 4 arroces, 1 all i pebre, 4 postres, 3 infusiones/café y de beber 2 aguas (botellas grandes de 1,5l), 2 cervezas y una copa de vino (la cesta de pan ya estaba en la mesa). El precio fue de 25€ por persona. La comida estaba buena, pero si tuviera que invitar a alguien de fuera de valencia para que probasen la cocina valenciana, seguramente iríamos a otro sitio ya que consideremos que hemos probado estos platos con mejores sabores en otros restaurantes. Estábamos en el primer turno de comidas y ya no quedaban clòxinas (luego nos pareció que sí que las servían en el segundo turno). Eso sí, en nuestro caso, la atención de la gerente fue paciente y el servicio diligente. Se puede pagar en tarjeta pero prefieren efectivo. Cuando pedimos la cuenta nos dijeron el precio total pero no la vimos en ningún momento, careciendo de transparencia.
Hacia tiempo que no venía y mi impresión en esta ocasión es que todo muy poco casero, es como si se hubieran dedicado a hacerlo todo para cumplir servir y arreando. Pedí all y pebre y mucha patata y poca anguila y los entrantes de calamares, puntillas y boquerones bien sin más. No se si volveré pero va a ser difícil.
Buen sitio para tomar un allipebre o un arrocito caldoso. Es un bar modesto, no esperes ningún lujo, lo justito y básico. No es el mejor allipebre de anguila que he comido, pero para hacerte un almuercito con los colegas en un paraje muy bonito de la Albufera y luego darte un paseo en barca es ideal.
Solo entramos a tomar una cerveza. Dije buenos días y ni me contestaron. Pedimos unas cervezas y con cara de pocos amigos, nos dijeron que nos servían porque no había mucha gente. Nos arrinconaron en la nevera de los helados sin dejarnos sentarnos en una mesa. Le pedí la cuenta sin terminar la consumición. 3,60 Euros, le doy 10 para que se cobre y me pregunta si no tengo algo más pequeño. Se va con el billete y pregunta a varias personas si tienen cambio. O sirves bebida o no sirves. Rocambolesco. No le doy menos puntuación porque no hay. Ojo, no critico la comida porque no comí, solo la atención.
Restaurante casero totalmente. Silla antiguas, manteles de papel, cazuelas de barro, camareros con libreta…el personal súper cercano, rápido y muy prestado a recomendar. Eliges 3 entrantes y un arroz. A mi personalmente los entrantes no me gustaron por su sabor intenso (pedimos la ensaladilla, allí i pebre de anguila y ama Ida de llisa). La paella valenciana muy rica pero demasiado gordo de espesor el arroz. Los postres caseros buenísimos y nos tomamos un cremaet de dos colores. El lugar y el paseo previo es encantador, el sitio muy casero, pero la comida para mi gusto demasiado intensa de sabores.
Un bar de lo más normal. Muy poca variedad a elegir para almorzar bocata. Noté falta de personal para atender a todos los clientes aunque entiendo que era hora punta y los habitantes de la zona llegan masivamente. Le doy un aprobado sin más.
Muy buen sitio para disfrutar de los arroces, la familia y sus alrededores. Arroz del senyoret y meloso de Bogavante muy buenos. Los entrantes muy buenos también, a destacar el all i pebre. Calidad precio muy bien. Volveremos. La chica que nos atendió es muy agradable y simpática, además nos trató excelentemente.
Se encuentra en una ubicación preciosa para pasear antes o después de comer en este restaurante que da unas comidas buenísimas a precios increíbles y el servicio no puede ser mejor, muy recomendable
Fatal, pésimo. Mas bien no volveré. Mal gusto al cocinar el allí pebre. Sirven para dos, dos colas de anguila por encima de las patatas mostrando la piel seca. Las patatas nadando en un plato con un caldo totalmente insípido. Nada recomendable
Como Argentino turista, he ido varias veces y puedo decir que el plato “All i pebre” (anguilas, papas, ajo y pimentón dulce con algo de picante) es una “pasada”. Súper recomendable.
Lo conozco muchos años y siempre muy bien pero hoy hemos ido a comer y la verdad que hemos salido todos con hambre, mucho precio y poca comida, creo que no volveré.
Cocina típica Valenciana. Calidad precio medio. Para mí lo mejor es el entorno. Venir a comer y disfrutar de un paseo entre los arrozales es espectacular.
Buenos días vaya trato e tenido hoy en casa baina e ido a reservar para comer y me dice la señora dueña que estaba cerrado cuando estaba abierto montando las mesas de las comidas, quería decirle que si trata así al personal pronto se quedará en el paro
Excelente la comida y buen trato. Me moría de ganas de comer un allipebre aquí y el resultado ha quedado a la altura de las expectativas. Una vez probado el lugar, no dejo de recomendarlo a amistades y familia.
Entorno inigualable, precioso. Fuimos a casa Baina con reserva. Instalaciones antiguas y menaje igual. La comida, nada del otro mundo. Raciones pequeñas y gran desilusión con el Esgarraet, estaba hecho con pimientos de piquillo de lata! Y las raciones de los arroces también muy cortas, nos quedamos con hambre casi, el del Senyoret, salado!
Siempre ha sido un lugar especial, por su entorno y un allipebre aceptable, pero el último almuerzo un desastre, una anguila y un montón de patatas con un agua mineral pequeña 11 €. Un abuso
En el mismo puerto de Catarroja, un enclave espectacular. El restaurante es espacioso y aseado. El servicio correcto. La cocina buena, el all i pebre espectacular
Buen tapeo. Destaca el all i pebre de anguilas, exquisito. El entorno es precioso, pasear tan cerca de los arrozales y junto al embarcadero es todo un lujazo.
Encantados, fuimos a comer 5 personas en plenas comuniones y el servicio muy atento, la comida muy buena y el precio barato. Ambiente familiar y comida casera de calidad.volveremos
Mal, he ido por primera vez, no volveré, la comida escasa para lo q vale el menú, nunca he visto poner un plato de paella en un plato de postre y además poner lo quemado.no me ha gustado nada.lo único el postre y la camarera amable
A casa Baina (port de Catarroja) hem estat ben atesos per la gent de la cuina i per Pepe, el cambrer, càlid i bon conseller durant tot el dinar. Dinar de menú i amb alguna entrada és una satisfacció, un cremadet de rom per a acabar i després una passejada per la vora del canai i entre les basses, just el primer dia que havien tirat l'aigua per a començar a omplir les basses on plantar l'arrròs. Molt recomanable per a amants de la cuina del país i de la bicicleta.
Entorno privilegiado, menu entre diario muy bueno por 10€. La camarera de sala muy agradable, la de barra la verdad es que no. El menu no dejan pagarlo tarjeta.
Una atención pésima. Llegamos a almorzar a las 10.30 y no tenían nada más que una tortilla de cebolla seca. El bocadillo fue tamaño reducido y de sabor desagradable. Pero la mayor sorpresa fue que a las 11.30 la señora que nos atendía nos comenzó a retirar cosas de mala manera invitándonos a marcharnos en varias ocasiones. Al salir nos despedimos y ni se dignó a contestar. Desde luego, con esa calidad y variedad y con esos modales no nos vuelven a ver el pelo ni en fotografía.
Muy buena relación calidad precio cantidad, menú económico, personal amable y rápido, platos típicos valencianos y de la Albufera. Situado en un sitio encantador y con posibilidad de muchos paseos, incluso en barca.
Restaurante situado en el Puerto de Catarroja (Valencia). Fuimos con unos amigos a comer All i Pebre, estaba muy bueno. El servicio muy bien. Recomiendo reserven.
Hem dinat hui 9 persones. Ja hem dinat unes quantes vegades. Coses bones: els arrosos, l'all-i-pebre i l'ensalada de llisa, bé l'atenció i no hem esperat massa. Coses que no mos agraden: l'esgarraet, sense oli d'oliva, alls supergrans i pimentons no torrats. La carta te la lligen i la factura igual o un paperet.
Me ha gustado mucho la comida, un arroz con setas y otro arroz meloso q estaban de vicio. El local es un poco viejete y el servicio esta bien. Los postres caseros son muy buenos y ademas acompaña q luego puede dar paseos en barca por la Albufera
Lugar emblemático en el que puedes degustar un riquísimo All i pebre, a mí me gusta que pique, así que, hay que decirlo antes de que te lo traigan, de lo contrario, lo traen sin "pebrera" Buenísima atención, el camarero ha sido amabilísimo.
Excelente el "all i pebre" y la paella tradicional. Es imprescindible reservar, ya que se suele llenar. Fuimos con gente de la zona, nunca hubiéramos entrado sin conocer (por la ubicación y porque desde fuera no tiene pinta de restaurante de calidad). La única pega es que estaban muy estresados y casi quedamos sin comer porque no se aclaraban con las reservas, y que fuimos "obligados" a pagar en efectivo a pesar de que ponía carteles de que se aceptaba el pago con tarjeta. No entregaron factura ni ticket ni nada, sólo el precio cantado. 75€ un par de entrantes, paella para 4, dos postes y dos cafés. Recomendaría la visita a inspectores de la AEAT:)