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Soy motero desde hace muchos años y he visitado muchos bares de almuerzos. En este parecía que molestamos, el servicio pésimo y la comida nada del otro mundo. En la salida del pueblo vimos a todos los moteros en otro restaurante. Por algo será.
Pedí una Coca-Cola y me la sirvió sin nada. Le pedí si ponía unos cacahuetes o aceitunas. Me puso un platillo con ocho Aceitunas rellenas. (estaba malas) Pague tres euros y me produjo una descomposición de campeonato. Sitio a evitar.
Un sitio estupendo para comer en pareja, amigos o en familia, ya que tienen un trato muy familiar y cercano, con una buena cocina casera. Sin duda repetiremos, ya que queremos probar un buen plato de arroz al horno, que es su especialidad y de la que han recibido un premio.
El único "pero" es que el local es muy pequeño y si se llena hay mucho ruido ambiental, y rompe un poco la magia. Esto se soluciona reservando una mesa en su terraza, eso sí, con el buen tiempo, porque en Fontanars hace frío en pleno invierno.
La comida hubo platos mejores y otros más normales. Pero lo k fue insoportable es comer dentro con un Eco y retumbe de vocerío horrible y si encima los de la mesa de atrás no sabían ni lo sabrán en su vida hablar para los k tienes cerca y no k hablen para k los escuché el pueblo entero! Apaga y vámonos
A great little restaurant in Fontanars dels Alforins, a small town in a great wine district! I was there with my employer, and we had whole roasted piglets as the main dish. Incredible! I think the piglets are a special order, as it takes quite some time to prepare. Good wine, fantastic food, and a great atmosphere. Hey, their local wine is excellent, didn't I mention it?
7 euros una tostada de tomate con 4 trocitos de jamón zumo de bote y un cortado, creo que eso dice mucho pero no queda ahí la cosa por que la mala educación del camarero me dejó atónita y le sumamos que para aliñar la tostada el bote del aceite caducado por lo que entiendo que lo recargan algo que no se que tan legal será.
La comida buena, en estas circunstancias de pandemia, se les ve poca ganas de trabajar y malas caras al sentarnos en vez de alegrarse por tener clientes.
Pues yo puedo hablar en cuanto a los almuerzos, que por cierto los bocadillos muy buenos y bastante grandes, te ponen unos cacahuetes mientras te sirven, y el precio es bastante razonable, no es caro. Yo siempre que voy allí almuerzo en la coca, lo recomiendo.
Atención profesional perfecta. Especialidades muy típicas. Destacar all y pebre, plato reconocido, internacionalmente, como el mejor del mundo. Arroz al horno, cordero lechal inmejorable y a la brasa. El entorno es supercasero;sin lujos. Estupendo.
Encantadores todos los trabajadores y muy buena cocina, muy bien de precio, lo recomiendo a todos, sobre todo los raiders, buen lugar para almorzar o comer,
Restaurante con ambiente agradable, era un día con evento en la población por lo que estaba abarrotado de gente, aún así, muy agradecidos de que nos hicieran un bocadillo de lomo con tomate y queso para llevar. Pero no pudimos hacernos el café, aunque me fui agradecida.
Muy buena calidad y variedad en comida casera, especialidad en la sepia y todo tipo de carnes a la brasa y a un precio espectacular lo recomiendo al 100%
Muy buena experiencia. Buena calidad. Agradable Aunque no sabes los precios hasta el final. No hay carta y pueden cobrarte lo q ellos quieran. Me pareció caro para lo que comimos. Ojo con eso
Poca cantidad de comida y cara, plato "combinado" 7 patatas fritas congeladas cocidas en aceite (pringosas) 4 chuletas de cordero del tamaño de una moneda de 0.50 céntimos (buenas) algo parecido a un pisto (1 cucharada de postre como mucho) 9 EUROS. En fin.para no volver.
Bar-restaurante ubicado en la plaza del pueblo de Fontanars dels Alforins. Se come muy bien, comida tradicional mediterrania, muy visitado por ciclistas los fines de semana en horario de almuerzos, el precio es asequible, tiene terraza exterior.
Fuimos a comer un domingo cualquiera. No disponían de mucha variedad a la hora de elergir bocadillos. Nos trataron diferente a la gente del pueblo y para postres nos querían cobrar 40€ por 5 bocadillos, a lo que devolvimos la cuenta y un camarero salió pidiendo disculpas, que el precio era erróneo. Nada más y nada menos que 20€ menos. Nos trataron de tontos y les salió el tiro por la culata.
Para empezar no hay carta y la variedad se queda en un suficiente. La atención muy extraña, poca simpatía. Al acabar nos sacaron un papel con el gasto, con un precio 20€ por encima del real. Lo cambió sin problemas. No creo que vuelva.