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Volví ayer, justo en su cierre de temporada, casi despues de 15 años sin volver y me hicisteis llorar. Me hicisteis llorar de alegria, de recordar esos sabores que de jovencito disfrutaba tanto y que seguis haciendo igual de bueno! Me alegrasteis el día con esa pizza que tanto recordaba, despues de tantos años que sigais haciéndolo igual de bueno fue una pasada la experiencia. El año que viene vuelvo en su apertura sin dudarlo. Pau y todo su equipo son un encanto y hacen un servicio increíble. No cambiéis nunca! El drac para siempre!
Buen trato y comida excepcional. La paella Valenciana estaba de muerte. El servicio muy bueno. Los precios asequibles. Tienen Mahou! (Que eso gana puntos)
Es el mejor sitio del Mareny para tomar algo. Los camareros y Pau son un encanto. Pero es una pena porque la comida es muuuuy floja excepto pizzas y bocatas. Sería el mejor si no fuera por la comida.
Cenamos con 4 niños y salimos a 12€. Comida en general bien, calamares y sepia buena, bravas no le quedaban y lo sustituyeron por fritas, las tellinas regular, el precio está bastante bien para la localización que tiene. Repetiremos.
Tapas muy generosas y buen producto. Atienden rápido y precio ajustado. El gerente es un crack gestionando las mesas y las chicas de la cocina muy atentas. Muy recomendable.
Al principio nos extrañó que ninguna mesa a nuestro alrededor pidiera arroz, pero después de probar un arroz del señoret muy muy pasado, con cebolla, con el marisco con sabor a mal descongelado y donde lo tostado estaba arriba del arroz, no nos extrañó. Pedimos una ración de calamares y unas ensaladas que estaban ricas. Las otras mesas pidieron hamburguesas y bocadillos que tenían buena pinta, pero que a nadie se le ocurra pedir arroz ahí. En general la atención no fue mala, pero después de más de media hora que terminamos de comer sin que se nos acercara ningún camarero y preguntamos si era posible tomar café, oír al camarero decirle a su compañera con desdén y burla “y ahora estos quieren café “ fue perfecto… Además, en la cuenta intentaron cobrarnos el doble de botellas de aguas.
Encontré este restaurante por casualidad y me llevé una grata sorpresa en todos y cada uno de los aspectos, salí de allí fascinado por la gran atención al cliente, maravillado por la calidad de su comida y más aún con el precio, y con todo ello se lleva un 10 en todo su conjunto
Restaurante muy recomendado, excelente relación calidad-precio, servicio muy amable y atento, te atienden sin prisa pero te sirven rápido. Seguro que volveré!
La sangría aguada, no llevaba vino. Despues las patatas bravas muy poca cantidad y malas. Pedimos chivitos y está sin mezcla y la lechuga pasada. Los huevos rotos sosos. Los calamares arreglo el precio muy poco cantidad. Y parte de eso todo llegaba con mucho tiempo de separación. Para lo que se paga es un poco decepcionante.
Fuimos a cenar y no nos gustó nada, la sangría estaba aguada era hielo nada más, los bocatas el chivito lo devolvimos pq la lechuga estaba pasada y no le pusieron casi mezcla dentro, las patatas bravas eran cocidas.bueno que para el precio que tienen deja mucho que desear
Comida casera, pizza buenísima, entrantes muy buenos, muy buena relación calidad precio y una atención excelente. Todos los veranos acudimos ya que es uno de los Restaurantes preferidos
Si fuera por la comida se llevaría alguna estrella más, pero el servicio es bastante lento, esperamos mucho para ser atendidos o por unos simples cafés. A parte de todo esto, parte de los camareros solo nos hablaban en valenciano, sabiendo y recibiendo nuestra respuesta en castellano. Entiendo que esta comunidad autonoma tenga su dialecto, pero si viene una persona inglesa tratamos de que nos entiendan hablando en inglés. Es la única queja que podríamos poner. Por lo demás recomendable la pizza, gofres y los calamares!
Apariencia de bar de playa aceptable pero calidad y sabor cero patatero. Cervezas servidas medio calientes. Pedimos bravas y pan con tomate porque a la 1 del medio día nos dijeron que los montaditos de la carta ya no los hacían Pues bien, las patatas bravas grasientas, quemadas y sin una gota de sal. Con 2 sobres de ketchup al lado, un pegote de choví y un bote de salsa brava (hacendado). En fin, se quedaron todas en el plato. Y en cuanto al pan con tomate… era pan duro de mercadona casi churrascado (se pasaron de tiempo con la tostadora) y un tarrito de tomate rallado en el centro del plato, también insípido. Pedí aceite y sal para poder comer algo ese día. No digo mas.
Años y años disfrutando del mismo sabor de las pizzas, sinceramente no controlo si en estos años han cambiado de dueños o sino, pero siempre que voy sigo disfrutando de las mismas pizzas y mismo sabor. Bar al lado de la playa y un muy buen trato del personal siempre que he ido tanto a comer ayi mismo, como para hacer un pedido para llevar. Recomiendo 100%